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Los alumnos del colegio de Villamayor aprenden los primeros auxilios con muñecos y música

"Son como esponjas" destaca el pediatra José David Herrero, que echa en falta que los conocimientos estén reglados y sean obligatorios

Los alumnos del colegio público Julio Rodríguez Villanueva de Villamayor ensayan la reanimación cardiopulmonar con el pediatra del centro de salud de Infiesto José David Herrero y la enfermera Cruz Gutiérrez. CRISTINA CORTE

Saber cómo actuar en una situación de emergencia médica y prestar los primeros auxilios es tan importante como la tabla de multiplicar. Sin embargo, este tipo de conocimientos aún no están reglados en los centros educativos de la región pese a las recomendaciones de numerosos organismos europeos.

Esa fue una de las quejas que lanzó ayer en Villamayor el pediatra del centro de salud de Infiesto José David Herrero, que visitó de forma voluntaria el colegio público para enseñar a los escolares técnicas como la reanimación cardiopulmonar (RCP).

"Estar en los colegios te permite a la larga llegar a toda la población y encima en estas etapas los críos son muy receptivos, absorben los conocimientos como esponjas", explicó el médico, que estuvo acompañado por la enfermera de pediatría Cruz Gutiérrez. Los dos insistieron en la importancia que tiene la actuación de los testigos para salvar la vida de una persona en parada respiratoria. "Las probabilidades de supervivencia se multiplican si se actúa rápido pero sólo un 30% de las personas saben qué hacer y se atreven a hacerlo", dijeron.

Para que los alumnos de infantil, 1º, 2º y 3,º de Primaria de Villamayor interiorizaran mejor los conocimientos, los sanitarios les enseñaron una canción en la que se repasan los pasos básicos a seguir: asegurar la zona, llamar al 112 y comunicar la ubicación, comprobar si respira y hacerle la reanimación en caso contrario. Los niños llevaron muñecos para practicar la RCP. "Si conseguís acordaros de todo esto y ayudar a una persona que está malita seréis héroes", les aseguró el pediatra. Herrero indicó que es a partir de los 8 años cuando los jóvenes desarrollan fuerza para ejecutar la rcp pero que conviene se vayan familiarizando antes con ella.

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