Ser mujer y llegar a la primera línea de la política se puede conseguir, pero a base de esfuerzo, sacrificio personal y mucho estudio. Ese fue el mensaje que lanzaron ayer, en el Instituto de Infiesto, la diputada socialista Margarita Vega, la exconsejera de Cultura socialista Ana Rosa Migoya, la presidenta y portavoz del PP de Piloña, Mª Teresa González, y la teniente de alcalde socialista Patricia Ferrero. Las cuatro se formaron en el IES piloñés y por eso quisieron sumarse a los actos por el 50.º aniversario del centro compartiendo con los actuales alumnos su experiencia dentro y fuera de las aulas.
La primera en intervenir fue Vega, licenciada en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad de Oviedo. Lo hizo para reivindicar el valor de la política "entendida como un medio para mejorar la vida de las personas". La también exconcejal en el Ayuntamiento de Oviedo valoró el avance de las tecnologías que permiten "tener toda la informacióna golpe de clic" y defendió la igualdad de oportunidades "como piedra angular sobre la que se sustenta la democracia". En la misma línea se expresó la exconsejera de Cultura, Comunicación Social y Turismo, Ana Rosa Migoya, quien defendió la educación como único ascensor social para prosperar. "Con 14 años tenía claro que, siendo mujer en la zona rural y de familia humilde, no quedaba otra que estudiar", dijo. "Conocí a hombres que, sin formación, ocuparon cargos altos en política, pero no mujeres, que para llegar a primera línea tienen que demostrar siempre su capacidad y titulación", ejemplificó.
La también exconsejera de Consejera de Administraciones Públicas aseguró que la política da satisfacciones, pero "desgasta mucho y es cruel", por lo que a veces conviene pasar página. En su caso, lo hizo trabajando en un centro especial de empleo que integra a personas con discapacidad en el mundo laboral. "Las empresas privadas cada vez nos piden más mujeres porque tienen más capacidad de trabajo", dijo.
La presidenta del PP de Piloña, M.ª Teresa González, invitó a los estudiantes a sacar el máximo rendimiento a su estancia en el instituto. "Cuando yo estudiaba no había tantos medios, tenías que pagarte el comedor de tu bolsillo y el transporte, si es que lo había", resumió.
La teniente de alcalde de Piloña, la socialsita Patricia Ferrero, refirió que sus mejores amistades las había tejido durante su estancia en el IES de Infiesto. Ferrero lamentó que la profesión política esté tan denostada, pese a que exige una vocación de servicio público y requiere gran sacrificio personal. "Es duro escuchar que todos somos iguales, unos ladrones", dijo. Además animó a los chavales a mejorar su formación porque "hoy en día es difícil encontrar trabajo incluso para los que tienen una titulación".
