El ambiente festivo inundó ayer las localidades llaniscas de Quintana y Piñeres de Pría, donde un buen número de aldeanas y porruanos festejaron el día grande en honor de Santolaya y los actos por la Inmaculada Concepción. En Quintana, la solemne procesión dio paso a un festival folclórico a cargo de los jóvenes del pueblo en el que se interpretaron algunos de los bailes más conocidos del Principado, como el quirosanu. Por su parte, en Piñeres la procesión tuvo un toque más tradicional que nunca, ya que la vecina Rosa Cueto engalanó este año el ramu recuperando viejas costumbres que encontró en una fotografía de 1921. "Había cosas muy distintas, como un mantón de manila y pañuelos", explican en Piñeres, informa C. MURUZÁBAL. A la izquierda, los bailes de Quintana; a la derecha, aldeanas y porruanos, con el ramu de Piñeres.