La convocatoria para cubrir las seis plazas de técnico de educación infantil que requiere la nueva escuela de bebés de Infiesto reunió ayer a más de trescientos opositores en la capital piloñés (por cada plaza peleaban una media de sesenta aspirantes).
La prueba teórica se desarrolló en el Instituto de Infiesto y quienes la superen volverán a ser llamados para hacer lectura del examen. El jurado tendrá en cuenta los méritos de los asistentes, que pasarán a formar parte de una bolsa de trabajo con vigencia para cuatro años. Podían concurrir personas con el título de grado en Maestro en Educación Infantil, Maestro Especialista en Educación Infantil o Técnico Superior de Educación Infantil. Participantes en el concurso-oposición como la llanisca Inés Corces mostraron su satisfacción con la prueba. "Me voy con buena sensación. Esta es una buena oportunidad para tener trabajo estable cerca de casa", dijo.
Los seleccionados gozarán de una contratación temporal dentro del convenio de colaboración entre el Principado y el Ayuntamiento de Piloña, que cuenta con un presupuesto de 138.445 euros para este curso.
Está previsto que la escuela de bebés abra sus puertas al público en el antiguo parvulario del colegio de Infiesto en menos de dos meses y tenga capacidad para 78 alumnos a media jornada o 39 a jornada completa.
