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JESÚS BORDÁS | Alcalde de Ribadedeva

"Si quieren ubicar una planta de gestión de residuos en El Peral, estaremos en contra"

"Detrás de la rehabilitación de la Torre de Noriega hay un ingente trabajo administrativo del Ayuntamiento"

Jesús Bordás, en su despacho del Ayuntamiento. EMILIO G. CEA

Jesús Bordás Vargas (1975) es licenciado en Derecho por la Universidad de Cantabria y abogado de profesión. Afiliado al PSOE desde 2011, año en el que encabezó la lista de los socialistas en Ribadedeva, lleva ocho como alcalde del municipio.

- ¿Será este su último mandato si gana los comicios?

-Sí, es la última vez que me presentaré si la agrupación socialista de Ribadedeva me da su confianza. Considero que en los últimos ocho años se han hecho las cosas bien y ahora toca rematarlas. Los primeros cuatro años fueron complicados al pasar por una crisis económica y no me dio tiempo a hacer todo lo que quería llevar a cabo cuando decidí presentarme a la Alcaldía. En política hay que saber llegar, estar y también marcharse. Doce años están bien para desarrollar lo que tenía pensado, y son los mismos que estuvo mi padre como alcalde (su progenitor, Modesto Bordás, fue regidor entre 1991 y 2003).

- ¿Qué le falta por hacer?

-La economía ha mejorado y hemos salido de una situación muy complicada. Ahora estamos con unos números muy positivos y me gustaría, entre otras cosas, dejar la deuda a cero. Hemos acabado el año con 475.000 euros de deuda y quiero rematar algunas cosas más, como la traída de aguas a Boquerizo, la creación de una zona deportiva en La Peña con pistas de pádel, y la rehabilitación del tejado de la Casa del Pueblo de Pimiango y de la capilla de San Emeterio.

- ¿Cómo era la situación económica cuando llegó?

-No era buena por la situación general que había debido a la crisis. Nos afectó mucho el tema del ladrillo y la urbanización desmesurada, un poco como pasó en Llanes. Nos afectó para lo bueno, primero, y después para lo malo. No me gusta dar cifras, pero nos suponía graves problemas de gestión. El trabajo que se hizo al respecto ha sido bueno en este sentido. Se ha mejorado la situación económica y, al mismo tiempo, se hicieron muchas obras. Ahora que tenemos una situación más saneada, el futuro se presenta prometedor.

- El turismo parece que es la gran apuesta del concejo.

-Sin olvidarnos de otros ámbitos, sí hay que reconocer que se apostó mucho por el turismo en tres pilares que consideramos básicos: el mundo indiano, con la creación de un censo de emigrantes; la promoción de la feria, y la apuesta seria por la asociación de municipios indianos. Se han hecho cosas en la zona costera también, como la mejora de la playa de La Franca, la rehabilitación de aparcamientos y el cambio de luminarias, y se ha reforestado San Emeterio con la ayuda de EDP. La zona interior, más desconocida, se ha impulsado con la creación de la "Ruta de las tradiciones". También hay que recordar la rehabilitación del antiguo ambulatorio para su recuperación en favor de la vida social y cultural del Ayuntamiento, y la creación de una página web turística, y el futuro proyecto de construcción de una sala multiusos que queremos que sea una especie de pequeño auditorio con oficinas y locales para asociaciones, en el que ya estamos trabajando.

- El saneamiento de la Torre de Noriega, la "Ruta de las tradiciones" y la idea de restaurar la iglesia de San Emeterio, ¿buscan poner al concejo en una mejor situación turística?

-Sí, una de nuestras apuestas son el turismo y la cultura. La Torre de Noriega es una realidad en el presente, con las obras de rehabilitación ya en marcha tras muchos años de espera. Detrás hay un ingente trabajo administrativo por parte del Ayuntamiento, que la Directora General de Patrimonio Cultural del Principado ha calificado como pionero en Asturias. La ruta también es presente y pretende impulsar sitios desconocidos del interior del concejo y unirlos a través de un hilo conductor atractivo. La queremos convertir en un referente en el Oriente. La rehabilitación de la capilla de San Emeterio es futuro, al igual que la senda fluvial del Deva. Es un futuro que nos empeñaremos en hacer realidad.

- Su principal reto, ¿cuál es?

-Soy un alcalde muy accesible. La gente que me viene a ver no tiene que pedir cita. El Ayuntamiento debe tener siempre disposición de resolver los problemas de los vecinos. Seguir con esa atención personal es un reto que quiero continuar hasta el final. A nivel de infraestructuras, quiero seguir apostando por el medio rural, con la rehabilitación de caminos, el saneamiento de zonas interiores y la construcción de una pesa ganadera, sin olvidarnos de la mejora de las zonas urbanas de Colombres, Bustio y La Franca. Tenemos muchos proyectos en la cabeza y mucha fuerza e ilusión para llevarlos a cabo si los vecinos quieren.

- ¿Cuándo se va a abrir la escuela infantil?

-Las obras se ejecutaron por parte del Principado cuando entré de alcalde, en el año 2011, pero nunca se nos cedió. Su apertura va lenta, pero va hacia adelante. Nos hemos encontrado con muchos problemas. El edificio no está enganchado ni al saneamiento, ni a la luz, ni a nada. Estamos tratando de resolver estos problemas con el Principado para darles solución. Espero que pronto podamos disfrutar de ella, pero no quiero dar plazos.

- ¿Qué opina del malestar de los vecinos de El Peral con todo lo relacionado a la nave industrial donde denuncian que se pueden estar llevando a cabo actividades supuestamente ilegales?

-En el Ayuntamiento de Ribadedeva, mientras yo sea alcalde, se aplicará el principio de legalidad y de defensa del interés general, por encima del interés particular de asociaciones, empresarios y personas particulares. Nosotros, por encima de todo, defenderemos el imperio de la ley. El propietario de la nave podrá realizar aquellas actividades que la ley le autorice, pero si sigue con la intención de implantar una empresa de gestión de residuos, nos tendrá totalmente en contra.

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