El párroco de Infiesto, Manuel García Velasco, hizo ayer un alegato contra el abandono de animales tras la misa de San Antón, oficiada en la capilla de la Obra Pía de Infiesto. El cura defendió que las mascotas son un miembro más de la familia y pidió por ello que se las tratara con honestidad. En la festividad piloñesa, impulsada desde hace más de una década por la Hermandad de San Antón, participaron más de una quincena de perros y hasta un conejo llamado "Nube", propiedad del niño Juan Erice. Todos ellos esperaron a que concluyera la eucaristía en los jardines de la Obra Pía, donde fueron bendecidos.

Organizadores del evento como el vecino Pablo Prida celebró el poder de convocatoria de la cita, que cada año "va a más". "Empezó medio en broma, como una reunión de amigos que acabábamos de jubilarnos, y este año en la comida de confraternización que se celebra en Sellañu (Ponga) tras la misa hay más de ochenta inscritos", ejemplificó Prida, que acudió a la celebración con la perra "Paquita".

Entre los asistentes a la bendición se encontraba también Floro González, vecino de Infiesto que acudió acompañado de su yorkshire "Pancho". El perro, de nueve años de edad, fue especialmente acicalado para la ocasión con una chaqueta a medida. "Lo bañamos y pusimos guapo ayer. Es la cuarta vez que vengo porque me parece importante dedicar un día a las mascotas, que son el mejor amigo que uno pueda tener", aseguró el dueño.

A la celebración de San Antón en Infiesto también acudió, con su border collie "Pecas", el vecino de Villaviciosa Javier Teja, para quien este tipo de iniciativas "son de agradecer". "Me enteré por el periódico, vi que otros años había ambiente y lo traje, aunque el viaje en coche no le gusta mucho", dijo. El universitario Román Rodríguez-Noriega fue otro de los vecinos de Infiesto que se acercó a la Obra Pía. Lo hizo en compañía de "Turrón", el perro que Papá Noel le regaló a su hermana Cristina, de 8 años, durante las últimas Navidades. "Ella está en el colegio y no podía venir", justificó. "Tenemos también pájaros y tortugas, pero hacía mucho frío para traerlos a todos", dijo. La misa en honor al patrón de los animales estuvo amenizada en Infiesto por un gaitero.