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Piloña se blinda contra nuevos atropellos instalando seis pasos de peatones elevados

Los trabajos, que cuentan con 18.995 euros de presupuesto, se centran en la calle Covadonga y después se extenderán a las salidas de Infiesto

Trabajos para instalar un paso de peatones elevado en la calle Covadonga de Infiesto a la altura del parque. C. CORTE

El Ayuntamiento de Piloña instala seis pasos elevados de peatones para blindarse contra los atropellos en Infiesto. El equipo de gobierno piloñés quiere evitar a toda consta que se repitan situaciones como la vivida el pasado 27 de noviembre, cuando un niño de cinco años fue arrollado por un coche en pleno centro de Infiesto cuando regresaba a casa del colegio. El menor, que salió despedido varios metros tras el suceso, se quejaba de la cadera, por lo que tuvo que permanecer una noche ingresado en el hospital de Arriondas. Una semana más tarde, una joven quedó contusionada al recibir un impacto leve a escasos metros del parque infantil de La Corredoria.

En ese punto, un par de operarios contratados por el consistorio piloñés comenzaron a trabajar ayer en la elevación de un paso de cebra que obligue a los vehículos que circulen por la calle Covadonga a reducir la velocidad. Además, en una segunda fase el tramo del parque infantil que linda con la carretera se cerrará con una gran valla para evitar que los niños accedan a la calzada si se les cae un balón fuera, como ocurre a menudo. El alcalde piloñés, el socialista Iván Allende, confirma que la colocación de dicha valla ya está adjudicada a la empresa local Metálicas Torca, y cuenta con un presupuesto de 12.486,91 euros.

El proyecto municipal contempla el refuerzo de la seguridad vial en los aledaños de los centros escolares. Por ese motivo, otro de los puntos elegidos para instalar un paso elevado es el cruce de la gasolinera de Infiesto, también en la calle Covadonga. Los cuatro restantes se ubicarán en los próximos días en las entradas de Infiesto por Oviedo y Santander: dos en la avenida del Orrín y los otros dos en la calle Ramón y Cajal. Los trabajos, que concluirán este mismo mes, cuentan con un presupuesto municipal total de 18.995 euros. Las obras incluyen la demolición y reposición de parte de la acera afectada, la extensión del aglomerado correspondiente y la posterior señalización horizontal y vertical.

Paralelamente, el equipo de gobierno piloñés trabaja junto a la Policía Local y a los servicios técnicos para reforzar la seguridad de los peatones con otras medidas como la de mejorar el sistema de iluminación en las calles de Infiesto que soportan más tráfico.

Desde el consistorio se lleva tiempo insistiendo además en la necesidad de renovar el firme en carreteras como la N-634, que presenta un firme deteriorado a su paso por el concejo y en la que frecuentemente se registran accidentes.

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