La playa de Santa Marina, en Ribadesella, va a quedar libre de plásticos el próximo sábado. Y es que las jornadas antiplástico organizadas por la ONG Greenpeace llegan al arenal, donde se espera que un buen número de voluntarios colaboren con la recogida de este tipo de residuos entre las 12.00 y las 14.00 horas, tal y como ya se ha hecho con éxito en otros puntos del litoral español.

Esta retirada de plásticos llega en un momento en el que la limpieza de la playa riosellana es uno de los temas más comentados en la villa, pues tras las riadas del pasado mes de enero, que dejaron más de dos mil toneladas de residuos, los vecinos continúan esperando por los trabajos que devuelvan a Santa Marina a su estado habitual, antes de la llegada de la Semana Santa.

Unos trabajos que, tras las demandas del consistorio, la delegada del Gobierno, Delia Losa, había anunciado que llevaría a cabo un organismo estatal. Sin embargo, y ante latardanza, la pasada semana la alcaldesa del municipio, Charo Fernández Román, anunciaba que, en caso de que no se limpiara la playa antes del periodo festivo, tendría que ser el Ayuntamiento el que aprobara una partida de urgencia para poder hacerse cargo de la situación.