Una comisión judicial llevó a cabo al mediodía de ayer el desalojo de las cinco viviendas sociales ubicadas junto al tanatorio de Llanes. Todas las familias que residían en este lugar fueron realojadas en otros inmuebles el pasado verano, según señalaron fuentes municipales. El desalojo, previo a la demolición de las casas, se llevó a cabo al detectarse que en dichas viviendas, las cuales presentan graves problemas estructurales, seguían siendo utilizadas por algunas personas ya realojadas en otras. Un técnico de Vipasa estuvo presente en el desalojo.

Las casas serán tapiadas con el objetivo de que no se pueda acceder a su interior mientras Vipasa, empresa pública del Principado, lleva a cabo el proyecto de demolición que remitirá al Ayuntamiento.

Si bien su uso no fue el más adecuado, según sostienen desde el Consistorio, las casas fueron construidas con deficiencias en forma de humedades que provocaban un problema de "insalubridad".