El Ayuntamiento de Ribadesella quiere abrir dos nuevos aparcamientos a la entrada de la localidad de Cueves para Semana Santa con la idea de que los muchos turistas que en cada período vacacional se acercan a conocer el pueblo y la Cuevona, su espectacular entrada natural, accedan a él a pie, evitando así los grandes atascos y colapsos característicos de la zona.
Con este fin, el consistorio trabaja a contrarreloj para inentar salvar los "problemas administrativos" que, de momento, impiden abrir al estacionamiento de vehículos las nuevas fincas, gracias a las cuales se podría "multiplicar por tres" la capacidad de estacionamiento a la entrada del pueblo, según explica la alcaldesa del municipio, Charo Fernández Román. Y es que, actualmente el Ayuntamiento, desde hace ya unos años, tiene alquilada una finca de alrededor de 1.440 metros cuadrados que da cabida a "unos treinta o cuarenta coches", por lo que la apertura de los nuevos estacionamientos supondría una gran diferencia, ya que los turismos que podrían aparcarse en las inmediaciones de Cueves rondarían la centena.
Cabe destacar que el consistorio ya había tenido la intención de abrir un nuevo aparcamiento con este mismo fin en una parcela situada en la carretera de L'Alisal, pero esa idea, finalmente, se desechó porque su ubicación no era la más adecuada.
Además, el año pasado, precisamente durante los días de las vacaciones de Semana Santa, se estrenó un nuevo plan de circulación para llegar hasta la localidad de Cueves, que consistía en un circuito circular, de modo que los coches tuvieran que llegar por Tezangos e irse por la carretera de L'Alisal. Una medida que, por el momento, el consistorio no sabe si volverá a aplicar, ya que se encuentra estudiando esta posibilidad. Eso sí, en caso de que se aplicara, el recorrido podría variar. "Este año va a ser distinto porque el acceso por L'Alisal va a ser más fácil, no va a haber problema para que se crucen dos coches", asegura Fernández Román, ya que dicha vía va a estar arreglada y contará con un ancho mayor que el que tenía durante el mismo período vacacional de 2018.
Lo que sí que parece más claro es que se volverá a restringir el acceso con los vehículos a la Cuevona, pues la idea del consistorio es, precisamente, mantener a los coches fuera de esta maravilla natural y, por lo tanto, de Cueves para evitar así los tradicionales colapsos que se generan debido a la estrechez del pueblo y a que se este no cuenta con otra salida más allá que la Cuevona, que también sirve de entrada. "Queremos que los coches queden fuera de la Cuevona y que la gente pueda visitarla a pie", sostiene la alcaldesa riosellana. De esta manera, se repetiría lo ya ocurrido durante el pasado año, cuando tan solo vecinos, servicios de reparto y vehículos sanitarios o de emergencia tenían permitido el acceso rodado a través de la Cuevona.
Con todo esto, se están dando los pasos para intentar asegurar que los atascos se quedan fuera del pueblo y que turistas y vecinos puedan convivir sin mayores problemas durante las vacaciones de Semana Santa.
