El fervor por San José desbordo ayer las calles de la localidad llanisca de Posada la Vieja, donde un centenar de aldeanas hicieron sonar sus panderetas en honor al Santo en un alegre día festivo donde hubo tiempo para los reencuentros de aquellos que viven lejos.

Ese fue el caso de Natalia Santoveña, afincada en Madrid, quien no dudó en acudir y ponerse su traje de llanisca para participar en las celebraciones junto a su prima, Cindy Bueres, llegada desde aún más lejos. Bueres, afincada en Bruselas, no siempre puede acudir a San José "porque tener vacaciones en marzo es complicado", pero en esta ocasión la suerte estuvo de su lado. "No me lo quise perder", afirma. Juntas, participaron en la procesión y estuvieron presentes en el resto de celebraciones, como la misa y los bailes. Además, los porruanos ofrecieron al Santo tres ramos: uno infantil, llevado a hombros por Lucas Somoano, Enol Vicente, Lucas Sánchez y los hermanos Nel e Iyán Díaz, y dos grandes decorados con los colores de las banderas de Asturias y Llanes.

Además, en el concejo también se celebraba otra fiesta. En Pancar, honraron a San Patricio con una celebración que incluyó misa, concurso de paellas y comida popular y donde se homenajeó a las vecinas Maruja Junco, Adelita Delgado y Maruja Ordóñez.