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Barra libre para despedir el bar Tenis, histórico de la hostelería piloñesa

Carlos Carrocera y Mónica Espina cierran tras 18 años por la imposibilidad de asumir una reforma

Carlos Carrocera y Mónica Espina (en el centro) con parte de la clientela del bar Tenis de Infiesto. C. CORTE

No es un buen año para el sector hostelero de Piloña. Si en febrero se hacía público cierre del hostal-restaurante "Tamanaco" de Infiesto, este domingo fue el bar Tenis el que bajaba su persiana. Lo hacía, eso sí, organizando una fiesta de despedida con barra libre para los clientes más fieles que se prolongó hasta altas horas de la madrugada.

El negocio estuvo regentado los últimos dieciocho años por Carlos Carrocera y Mónica Espina aunque su apertura es mucho anterior, siendo junto al "Venecia" uno de los más antiguos de Infiesto. Ubicado en la céntrica calle Covadonga, a escasos metros de la gasolinera y del centro de salud de la capital piloñesa, el Tenis se había convertido en referente para vecinos de todas las edades. "Lo mismo te venían chavales a beber calimocho y comer el pincho de pollo con lechuga de rigor que los más veteranos a echar la partida. El ambiente y la armonía que se vivían aquí eran únicos", apunta la pareja. "No nos costaba venir a trabajar porque la clientela era excelente", subrayaron. Cuentan, no sin cierta tristeza, que el cese viene motivado por la imposibilidad de asumir los costes de una reforma integral del local, que llevan en régimen de alquiler. Y es que el edificio en el que se ubica el bar Tenis tuvo que ser desalojado en verano por riesgo de derrumbe, al detectarse daños en la viga de la puerta. Aunque los arquitectos descartaron deficiencias estructurales severas y el bar pudo volver a reabrir en pocas horas, Carrocera y Espina tomaron la decisión de darse un respiro y de paso buscar unas instalaciones más modernas. "Nos gustaría que fuera en Piloña porque aquí están nuestras raíces y hemos notado que la gente nos tienen un cariño inmenso. De momento lo que toca es descansar para poner las cosas en perspectiva y luego ya veremos, concluyeron.

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