Vecinos del núcleo rural de Labra, en término municipal de Cangas de Onís, ven como pasan los años y la Consejería de Infraestructuras, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente del Principado de Asturias sigue sin solucionar el argayo registrado a la margen derecha del punto kilométrico 0,950 de la carretera AS-340, que une Corao (Cangas de Onís) con Nueva de Llanes. La incidencia, ocasionada por una riega subterránea, data de hace más de un lustro. Hasta el momento, sólo una deterioradas protecciones a modo de "barreras" dejan en evidencia el punto concreto del socavón y, además, con la consiguiente peligrosidad para el transporte pesado que transita con regularidad por ese trazado, informa J. M. C.