La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Ribadesella teme nuevas riadas como en enero por las lluvias con el río sin limpiar

"Estamos con las manos atadas", se queja la Alcaldesa, que pide a Costas agilizar los trámites para despejar los cauces ante el temporal

Ribadesella teme nuevas riadas como en enero por las lluvias con el río sin limpiar E. G. CEA

Miedo a nuevas riadas en Ribadesella. Las previsiones de mal tiempo que se han anunciado para los próximos días están haciendo que en el concejo se vuelva a mirar al Sella. Allí, el recuerdo de las riadas del pasado mes de enero sigue fresco en la memoria y este nuevo frente meteorológico llega sin que, a juicio del equipo de Gobierno, se haya hecho nada desde las Administraciones para limpiar el cauce del río y paliar así los efectos de las lluvias, que a comienzos de año inundaron localidades como Lloviu o L'Alisal o que incluso hicieron desbordarse la ría en la misma villa durante la madrugada.

"Si hay riada, deshielo y mareas altas se volverá a inundar, contra eso no podemos hacer nada porque estamos con las manos atadas", lamenta la alcaldesa del municipio, Charo Fernández Román, quien después de escuchar junto al portavoz del Partido Popular a los vecinos afectados por las fuertes lluvias e inundaciones de enero acudió en busca de una solución a Costas. "Nos dijeron que solicitáramos limpiar el río si era para proteger los bienes de los vecinos, pero al final nada, es desesperante", cuenta. Y es que, aunque en un primer momento se había hablado de agilizar los trámites, al final para que los particulares puedan limpiar el cauce, tal y como los propios vecinos habían pedido, hacen falta procedimientos más largos, como un estudio de la zona, algo que requiere de más tiempo y que no es la solución rápida por la que abogaban desde el municipio para rebajar el peligro de inundaciones.

Por eso, por el momento el cauce del río sigue sin limpiar, algo que, según la alcaldesa, no es nuevo, ya que afirma que al menos desde que ella ocupa el cargo, hace casi ocho años, "nadie hizo nada".

Además, a la situación del río se suma la de la playa de Santa Marina. Allí, las riadas llegaron a acumular dos mil toneladas de desperdicios, y aunque el Estado se había comprometido a limpiar el arenal, por el momento esas labores de limpieza siguen sin llegar y desde el consistorio afirman que no conocen la fecha exacta en la que estas van a comenzar. Por eso, también existe la preocupación de que en el caso de que lleguen nuevas riadas el río pueda llevar aún más desperdicios a Santa Marina, lo que en consideración de la alcaldesa puede acabar resultando incluso "peligroso". "Un tronco de esos puede acabar en el mar a la deriva y ocasionar un accidente a un barco", apunta la regidora.

Eso sí, con la Semana Santa a la vuelta de la esquina, donde a la llegada de turistas se suma la celebración de las tradicionales carreras de caballos que cada año tienen lugar en la playa, el Ayuntamiento no se quiere arriesgar con el estado del arenal. Así, en caso de que la limpieza extraordinaria no llegue de la mano de ninguna otra Administración, será el Ayuntamiento el que la acometa con el dinero de las arcas municipales. Sin embargo, tendrá que hacerse a través de una partida especial porque, tal y como ha explicado el equipo de Gobierno, si la limpieza de todos los restos que actualmente hay en la playa se hace con la partida de limpieza de arenales contemplada en el presupuesto riosellano, no quedaría dinero para el resto de limpiezas del año. Una partida que contempla 72.000 euros para acondicionar los arenales durante el año, pero que no puede soportar limpiezas extraordinarias del calibre de la que precisa en estos momentos la playa de Santa Marina.

Compartir el artículo

stats