El plan especial de circulación para llegar hasta la localidad riosellana de Cueves durante la Semana Santa está aún en el aire. El Ayuntamiento aún no sabe si este año va a poder repetir el circuito que llevaba a los turistas hasta el pueblo por una carretera y que les hacía salir por otra vía para evitar así los atascos y las complicaciones derivados de la estrechez de las carreteras por la zona.
"Todavía no sabemos si se va a poder hacer, estamos pendientes de si podemos firmar para poner en marcha uno de los nuevos aparcamientos", explica la alcaldesa de Ribadesella, Charo Fernández Román, pues entiende que contar con espacio de estacionamiento de sobra es la clave para que el plan funcione con totales garantías.
Actualmente, el consistorio cuenta con un parking "muy pequeño", con cabida para unos treinta vehículos. En un primer momento, la intención del consistorio pasaba por acondicionar dos nuevos terrenos como aparcamientos, si bien uno de ellos ha quedado totalmente descartado y todavía se están realizando los trámites para ver si se puede poner en marcha el segundo, donde podrían aparcar "alrededor de cien coches". Una medida que sería muy importante, pues el equipo de gobierno entiende que no sería efectivo que hubiera un plan de circulación si al llegar a la localidad los visitantes no cuentan con espacio suficiente para estacionar.
A día de hoy también hay dudas sobre la prohibición o no de atravesar la Cuevona, que da acceso al pueblo, con el coche, aunque el gobierno municipal aboga por que los turistas, como ya ocurrió el año pasado, no puedan circular con sus vehículos por el interior de la cueva. Una prohibición que no afectaría a los vecinos de Cueves, a los servicios de reparto ni a los servicios de emergencia.
Medidas, todas ellas, que, de implantarse, buscan dar solución a los numerosos atascos que se generan cada temporada alta en el pueblo debido a la estrechez de sus calles y a que tanto la entrada como la salida deben hacerse a través de la Cuevona, lo que complica la circulación.
