La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Infiesto cambia de Jesús

Una lesión impide al protagonista habitual llevar la cruz en el vía crucis, y su relevo será quien hacía de Poncio Pilatos

Un camión descargando ayer en la plaza del Ganado de Infiesto la arena que formará parte del decorado del vía crucis viviente. CRISTINA CORTE

El vía crucis viviente de Infiesto cambia de actor principal. Por primera vez en sus seis ediciones, Jesucristo no será interpretado por el vecino Manuel Castañedo, que se recupera de una lesión y a quien los médicos le han recomendado no coger pesos. Como la cruz de la penitencia no es precisamente ligera, el papel será interpretado este viernes por Humberto Martínez, vecino de Samalea que hasta ahora ocupaba el papel de Poncio Pilatos. Se da la circunstancia de que ambos son electricistas en la vida real.

Castañedo sí ejercerá como Jesús en la representación de la Última Cena y el lavatorio de pies que se desarrolla mañana, en la iglesia parroquial de Infiesto, desde las siete y media de la tarde. Ese día tendrá lugar una de las principales novedades del programa de la Semana Santa piloñesa: la escena de Jesús ante el Sanedrín, prevista para las 21.30 horas en la plaza Mayor. La Cofradía del vía crucis viviente tiene preparados nuevo vestuario y decorados para la representación, que cada año congrega a mayor número de público.

Para ir calentando motores, hoy mismo tendrá lugar el pregón de la Semana Santa, que corre a cargo del sacerdote Manuel Jesús Fernández, de la Legión de Cristo, quien desde hace algunas ediciones se traslada junto con varias familias desde Madrid para participar en las celebraciones piloñesas. La cita es a las 19.30 horas en la iglesia parroquial de Infiesto, y a continuación habrá un concierto de marchas procesionales a cargo de la Asociación Musical "De la Fuente".

Pero sin duda el momento más esperado es el vía crucis viviente que se desarrolla por las principales calles de Infiesto el Viernes Santo desde las seis de la tarde. El culmen llega con la crucifixión y resurrección del hijo de Dios en la plaza del Ganado de Infiesto, convertida en un monte Gólgota al que no le falta detalle. Precisamente ayer operarios municipales se afanaban en apilar cientos de kilos de arena en la zona para dar el mayor realismo posible al evento.

Compartir el artículo

stats