El abastecimiento de agua no está en peligro en Ribadesella. Así lo afirma la alcaldesa del municipio, Charo Fernández Román, después de que en el pleno del pasado miércoles el portavoz de Pueblu, Ricardo Cangas, desvelara que en este comienzo de 2019 no se están cumpliendo los requisitos para que la empresa que gestiona el servicio pueda cobrar por su trabajo a los vecinos, una situación inusual que el propio Cangas calificó de "peligrosa".
La solución se espera que llegue "próximamente" en un pleno extraordinario en el que el secretario municipal va a presentar un informe que la alcaldesa espera que pueda poner fin al problema. Un problema que se remonta a diciembre, cuando la oposición votó en contra de adjudicar la gestión del servicio a la empresa señalada por la mesa de contratación.
Desde ese momento, la oposición entendió que la empresa que venía gestionando el servicio gracias a una prórroga podría seguir haciéndolo al no haberse formalizado un nuevo contrato, una visión que no comparte el equipo de Gobierno, por lo que la regidora ya había anunciado que no iba a firmar nada sobre el abastecimiento del agua sin un respaldo por parte de los técnicos, algo que no ha conseguido. "No conseguí que nadie por escrito me diga que el contrato es legal", afirma la regidora, que espera que el resultado del informe del secretario resuelva si se le debe adjudicar el contrato a la empresa escogida por la mesa o, en caso contrario, qué hacer.
