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La oposición cree que la gestión del agua es asunto del futuro gobierno riosellano

El servicio público está en el aire pendiente de adjudicarse, pero PP, Pueblu y PSOE piden sosiego tras meses bloqueado el contrato

El problema de la gestión del agua en Ribadesella no lleva camino de resolverse en el pleno convocado para esta semana, al menos con las posturas que los diferentes grupos políticos han manifestado hasta la fecha. Una situación que, de alargarse, presenta un futuro incierto sobre la continuidad del servicio, ya que, según reveló hace unas semanas el portavoz de Pueblu, Ricardo Cangas, la empresa que actualmente se hace cargo de la gestión no va a poder cobrar por ello.

En la oposición tienen claro que la gestión del servicio municipal debe resolverse en el próximo mandato, a cargo del nuevo gobierno que salga de las urnas. El portavoz del PP, Juan Manuel Blanco, firma que no están en contra de ninguna empresa, pero sostiene que ya habían advertido de que su voto iba a ser negativo por estar en contra de cómo se había llevado el proceso de selección, "Nos parece ilógico que esto se haga a quince días de entrar en funciones y con un Gobierno deslegitimado, nos resulta muy chocante la prisa y creemos que esto debería resolverse de forma más sosegada", apunta el edil popular.

En cuanto a Pueblu, Cangas aún no conoce el sentido de su voto porque debe reunirse la asamblea, pero afirma que para él "no cambia nada" la situación.

El conflicto que comenzó en diciembre del año pasado, cuando la oposición en bloque votó en contra de adjudicar el contrato del agua a la empresa que, según señalaron los técnicos municipales, había presentado la mejor oferta de todas las que se habían acudido al concurso. Sin embargo, los grupos de la oposición vieron que la baja temeraria que presentaba la entidad no estaba lo suficientemente justificada, por lo que decidieron posicionarse en contra de otorgarle la gestión del servicio.

A partir de ese momento, se abrió un debate para saber si la prórroga con la que Asturagua había estado gestionando el servicio desde 2015 seguía en vigor, algo que se resolvió el pasado lunes con el informe del secretario municipal: la prórroga se acabó en el momento en el que los técnicos apuntaron a una nueva empresa, por lo que ahora mismo Ribadesella no tiene un documento que una a ninguna empresa a la gestión del abastecimiento del agua.

Una situación inusual e incierta que se pretendía que se terminara en el pleno del próximo viernes, pero que de momento no parece que vaya a ser así. Y es que, si el PSOE afirmaba el pasado lunes que no han cambiado su postura sobre la empresa elegida por los técnicos debido a las "dudas" que les plantea su oferta, los otros dos grupos de la oposición de momento tampoco han cambiado sus posturas.

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