Querido y admirado José Antonio Fidalgo Sánchez:

En nombre de la Real Asociación Española de Cronistas Oficiales, de nuestra asociación en Asturias y en el mío propio, quiero felicitar muy sincera y cordialmente a la Corporación municipal de Colunga por el sensato y acertado acuerdo unánime de nombrarte hijo predilecto del concejo, por tus muchos méritos y tu pasión por la tierra que te vio nacer y que tan dignamente representas en tu calidad de cronista oficial.

Por ello, permítanme elogiar la brillante propuesta, ya realidad, que dignifica a la Corporación, porque demuestra con ello que, por encima de ideologías, todas muy respetables por supuesto, en determinados momentos, su partido se llama Colunga. Este entrañable acto es un claro exponente de lo dicho, dado que se está haciendo justicia con un personaje, con un paisano, que pasará a la historia no sólo de Colunga, sino de Asturias, por lo mucho y bueno que ha llevado a cabo y llevará mientras el cuerpo aguante que, como sabio que es y con lo bien que lo cuida su esposa Alicia, seguro que tendremos Fidalgo para rato.

No descubro nada nuevo, si digo que José Antonio siempre fue para mí un maestro, un ejemplo a imitar y sobre todo un auténtico amigo del que, haciendo un acróstico de su primer apellido, podríamos decir que tiene:

La F, de fiel a su tierra y a sus amigos.

La I, de incansable, de idealista.

La D, de detallista, lo que demuestra en todos sus libros y artículos.

La A, está claro que de asturiano y, como antes dije, de amigo.

La L, de Lastres, porque es cronista oficial del concejo al que pertenece dicha localidad, una de las más pintorescas y marineras del Cantábrico, junto con Cudillero, por supuesto.

La G, de gastrónomo, por razones obvias de todos conocidas.

Y la O de objetivo en sus ideas, siempre claras y alejadas de personalismos e ideologías a la hora de trabajar por su tierra, por Asturias.

Fidalgo es persona locuaz, dialogante, docente y decente, íntegro, de intachable conducta, un modelo de superación y laboriosidad y un ejemplo, en suma, de cómo son compatibles la química y la física, que de una y otra estamos hechos, unos mejor que otros. Y él tiene, en su vida, la fórmula de la excelencia cercana a la perfección.

En definitiva, reitero mi felicitación a la Corporación municipal por su sabia decisión de distinguir a un sabio, del que estoy orgulloso de ser amigo.