"Llanes tiene la lamentable virtud de ser el punto de España donde hay más pasos a nivel, 81". Lo dijo ayer Javier Soto, jefe de área de pasos a nivel del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif). Por eso, "en un plazo de dos meses" se presentará "una solución global y ambiciosa de los 81 pasos a nivel en el termino municipal", cuyo único objetivo será "cerrarlos porque son puntos de no seguridad", aunque siempre dando "alternativas de permeabilidad a la población". Este anuncio fue hecho por Roberto Muela, subdirector de Coordinación Técnica y Pasos a Nivel de Adif, que acudió a Posada de Llanes junto con otros técnicos para presentar el proyecto de supresión de tres pasos a nivel en Quintana. Una actuación que mantiene enfrentados a los vecinos y para la que no han hallado una solución consensuada en los últimos dos años y medio.

Muela aprovechó la visita para reunirse con el alcalde, Enrique Riestra. Y fue durante esa cita en la que se acordó el compromiso para definir "una propuesta der acción". Una de ellas, dijo Muela, será "el paso a nivel de Posada", para donde, a la espera de un proyecto detallado, "se mejorarán el firme, el pavimento y demás".

Supresión escalonada

En términos generales, "no hay medidas concretas aún porque debemos definir técnicamente el ámbito de actuación" y eso será lo que presenten el próximo mes de febrero a la Corporación llanisca. Habrá, eso sí, "muchas alternativas" que pueden ir hacia "la concentración de pasos, hacer caminos laterales para cerrar un paso y concentrar el tráfico en otro... las soluciones son muy versátiles y permiten posibilidades más flexibles que no pasen por la construcción de estructuras, aunque alguno llevará pasos superiores o inferiores", avanzó. En cualquier caso, "en 81 pasos no se pueden acometer 81 obras porque, entre otras cosas, no hay espacio físico", apuntó. La supresión será escalonada y se hará "en fases temporales de acción porque no se puede acometer todo en un mismo período", aseguró.

El período de acción que aún se desconoce es el de Quintana. Los vecinos, incapaces de hallar una solución global que satisfaga a todos, exigieron hace unas semanas una reunión con los técnicos de Adif que, tras el cierre de sus tres pasos a nivel, proponían como alternativa dos puentes, dos pasarelas peatonales elevadas y un camino paralelo a la vía. Esa fue la última, pero no había sido la única alternativa. De las presentadas, los vecinos las rechazaron todas. Pero Adif, después del último accidente en uno de los cruces del pueblo, decidió no plantear más propuestas y anunció la supresión de los pasos y la alternativa citada. Y tampoco convenció a la vecindad. Finalmente, el Ayuntamiento de Llanes medió para que los técnicos vinieran a escuchar a los vecinos. El Adif "atenderá a las modificaciones" que plantearon ayer. "Nuestro objetivo es recoger la sensibilidad vecinal y aglutinar en el proyecto el mayor consenso posible", explicó Muela. Eso sí, "dentro del cumplimiento de la Ley", apuntó Javier Soto, que, acompañado por Roberto Jiménez, ingeniero, y David Arenas, próximo jefe de área de supresión de pasos a nivel, escuchó las propuestas y desechó aquellas que técnicamente no son viables.

Paso inferior

Entre las que pasarán a estudiarse está la creación de un paso inferior para sustituir a uno elevado. Se hará para dar servicio "a peatones y ganado", aunque sólo "en el caso de que haya posibilidad de un drenaje de gravedad", es decir, que época de lluvias las aguas pluviales viertan solas al cauce de los ríos y no necesiten un sistema de bombeo. Además, los vecinos proponían variar el puente previsto para dirigir al tráfico al cruce de Piedra en lo que ellos conocen como la salida de Los Cerezales. Este punto es el que más controversia genera entre el vecindario por la "mala" salida a la carretera. El Ayuntamiento, y así lo avanzó la edil Marián García de la Llana, intentará gestionar con el Gobierno regional, la construcción de una rotonda en este punto. Los técnicos escucharon las opciones y pidieron "comprensión" a los vecinos. Y les advirtieron, además, de que cualquier construcción evitará estructuras de hormigón, como la que se plantea en La Galguera, con muros verdes para reducir el impacto.