Es la cara visible del tejido empresarial de uno de los pueblos con más proyección del concejo de Llanes. Rocío Alonso preside la asociación de comerciantes de Posada. Presume de pueblo y de que la mayor parte de los negocios estén impulsados por mujeres jóvenes. Tiene claro que el futuro pasa por no dormirse y continuar trabajando, pero reclama un apoyo a las administraciones para poder competir y ser un referente.
- Los empresarios de Posada forman un tejido comercial con mucho peso en Llanes.
-El comercio en Posada funciona muy bien porque trabajamos mucho. Somos pequeñas empresas, más de 130 entre Posada y el polígono industrial. Supongo que formamos un gran tejido porque ofrecemos buena calidad a buen precio y porque nos esmeramos cada día en dar lo mejor de nosotros mismos, que será lo mejor para nuestras empresas y para el conjunto de la población.
- ¿Posada podría convertirse en un destino comercial?
-Podría, sí. Pero tenemos que incidir en ello y trabajar al respecto. Tenemos que mover un poco las tardes, que parece que todo decae en ese momento del día. Y para eso necesitamos implementar la actividad ofreciendo alternativas, no sólo comerciales. Por eso pusimos en marcha este verano los mercadillos nocturnos de seis a doce de la noche. Hay que proponer iniciativas y ofrecer algo diferente.
- ¿Cómo ve la situación del comercio local?
-Está en un momento difícil. En general va bien, pero es cierto que es complicado competir con las ventas de las grandes superficies. Por eso tenemos que diferenciarnos, pero también los vecinos deben valorar nuestro esfuerzo, la cercanía de las ventas y lo que puede ofrecer el comercio local. Si ellos no apuestan por nosotros, nosotros tendremos que cerrar. Y el cierre de los comercios locales sí supone el fin de Posada.
- ¿Circunvalación sí o no?
-Tenemos a los socios divididos. Es complicado tomar una decisión al respecto. Unos lo ven bien y otros creen que sacar el tráfico de Posada sería el fin de mundo. Posada no es San Roque del Acebal, que quedó aislado con la construcción de la autovía pero que ofrece servicios más industrializados, pero tampoco es Llanes, a donde la gente va a pasear y a hacer cosas y, de paso, compra. Aquí la gente no viene a pasear. Construir una variante podría venirnos muy bien o muy mal, la realidad es que no lo sabemos. En cualquier caso, si la hicieran tal como se contempla en el Plan General, a Posada deberían compensarla proporcionándole unos servicios que ahora no tenemos. El Ayuntamiento debería hacer aparcamientos para facilitar el estacionamiento, deberían completar el mobiliario para hacerlo más atractivo?
- ¿Qué propone?
-Propongo una agenda cultural, que no tenemos y que en el Ayuntamiento concentran en la Villa. Propongo que se fomente el teatro en la calle, o en las instalaciones que tenemos. Que se hagan conciertos, concursos de pintura, una programación de ocio que atraiga hasta aquí a vecinos del pueblo y de fuera de él.
- Si tuviera que plantear una prioridad de necesidades en Posada, ¿cuál sería?
-Arreglar las vías del tren. Es terrible la situación en la que están. Y no es nueva, llevan así años. Cruzar la vía del tren en Posada es algo horrible. Desconozco por qué está así, yo sólo sé que cada vez que se asfalta la carretera las vías quedan más hundidas. Pasar en silla de ruedas o con un carricoche es cada vez más difícil, así que actuar ahí sería mi primera opción. Y acabar con la suciedad y las ratas. Hay zonas en donde los contenedores están rotos y los bichos lo anegan todo. Deberían embellecer Posada, tenemos cuatro árboles y la mitad se van a caer si no los cuidan.
- ¿Cuál cree que es el mayor potencial de este pueblo?
-Sus empresarios. El tejido comercial es muy reseñable y, además, está compuesto por mujeres en su mayoría. Eso no sólo dice mucho de Posada, sino del empuje que nosotras solemos hacer a todo lo que planteamos.
