El Gobierno del Principado de Asturias ha reservado en los presupuestos regionales una partida de 376.284 euros para reforzar la seguridad frente a las riadas y las avenidas de agua en Arriondas. De esta forma el Ejecutivo se compromete, de facto, a iniciar un proyecto que "nos urge", subrayaba ayer el portavoz del Gobierno local, Víctor Rodríguez Caldevilla, y que sólo depende de la firma de un convenio entre las administraciones . Aunque eso será "en cuanto se forme el Gobierno de España".
La cantidad reservada en las cuentas autonómicas "garantiza el inicio" de las obras, pero es a todas luces insuficiente. No en vano, evitar las inundaciones en Arriondas costará un total de 16 millones de euros de los que el Gobierno autonómico deberá aportar cuatro (el 25% del proyecto) y el Gobierno estatal doce (el 75%). Y el Ejecutivo de Adrián Barbón tan sólo ha reservado un 9,4% del total que debe asumir para proteger a la capital de Parres de las crecidas de los ríos Sella y Piloña.
Los trabajos para evitar los colegios anegados, las calles intransitables y el desalojo del hospital Grande Covián -como sucedió en las inundaciones de 2010 y a principios de este 2019- cuando el caudal se eleva por encima de la cota habitual ya cuenta con todos los parabienes medioambientales y con el compromiso municipal de aportar los terrenos necesarios para acometer la obra, así como el visto bueno para gestionar y mantener, una vez puesto en marcha, el sistema de protección que frenará a los ríos para evitar desgracias.
"El convenio está presentado, pero no está firmado, y hasta que esa firma no se materialice no podemos empezar", asumía Rodríguez Caldevilla, quien subrayó que la tramitación se ha gestionado de forma paralela para adelantar lo máximo posible los plazos. "El proyecto ya cuenta con una valoración positiva del impacto ambiental", con lo que los plazos podrían empezar a contar desde 2020, fecha en la que, previsiblemente, se firmará el convenio entre las administraciones. Si todo marcha según lo previsto, en dos años las obras estarán finiquitadas y las inundaciones dejarán de ser una preocupación para gestores y vecinos en épocas de lluvias y deshielo. La solución, de hecho, según indicó en su momento el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, garantizará la seguridad en la capital de Parres por un período de 140 años, un cálculo que recoge el proyecto respecto al impacto de avenidas.
Rodríguez Caldevilla reconoce que "lo ideal hubiera sido iniciar la obra en enero de este año, pero nadie imaginaba que estaríamos con un Gobierno en funciones tanto tiempo", con lo que la falta de acuerdo en Madrid afectó de lleno a Arriondas.
Las obras incluyen, entre otras actuaciones, la elevación de muros de defensa en la zona del Barco y la sustitución de los puentes de La Concordia y del ríu Chicu. Habrá intervenciones en ese caudal, donde se aumentará la sección de los desagües; en el río Piloña se prevé ampliar el cauce en unos sesenta metros, y en el Sella se construirá un paseo a doble altura y tres accesos al cauce. Sólo falta que se liciten los trabajos para que los ríos en Arriondas no se salgan de su cauce.
