El centro de visitantes de la cueva de Tito Bustillo está "abandonado, en un estado lamentable e infrautilizado". Así lo denunció ayer el diputado del PP José Felgueres, en una visita a Ribadesella para anunciar que su partido presentará una enmienda parcial al Presupuesto regional "para que se habiliten 100.000 euros que sirvan para acondicionar el edifico de entrada" que atraviesan todos aquellos que acuden a visitar la caverna, declarada Patrimonio de la Humanidad.

El edificio, lugar de llegada y de espera para las visitas guiadas, tiene goteras, vidrios rotos, falsos techos desprendidos, humedades y una situación que no parece ser la imagen más apropiada para "uno de los recursos turísticos más importantes de la región", recordó el parlamentario regional, que acudió acompañado por el también diputado Álvaro Queipo y el edil riosellano Paulo García.

Felgueres lamentó que el documento presupuestario que se aprobará en el Principado reserve "únicamente una partida genérica de 30.000 euros para todos los yacimientos de Asturias" y se olvide de mantener las instalaciones que sirven no sólo para recibir a los visitantes a la gruta riosellana, sino para proteger tanto la entrada a Tito Bustillo como a la cueva de Ardines. Resulta más llamativo para los populares que "la consejera de Cultura, Berta Piñán, reconoció las deficiencias" una vez fue preguntada al respecto de la falta de mantenimiento del centro riosellano, pero, según Felgueres, "se limitó a señalar que se realizarían unos estudios dentro del presupuesto de arqueología". Sin embargo, reprochó el diputado, el presupuesto reservado "resulta insuficiente".

"Si queremos apostar en Asturias de verdad por un turismo de calidad y de excelencia estamos obligados a prestar a los turistas unos servicios de calidad y excelencia como ya hacen los empresarios del sector turístico", sentenció Felgueres. "No podemos exigirles a los hosteleros que ofrezcan calidad y tener infraestructuras públicas en este estado", recalcó.

El popular acudió a Ribadesella tras la llamada del portavoz municipal del PP, Paulo García, quien reclamó la atención que el centro merece. "El antiguo museo de la cueva está actualmente infrautilizado y se usa como almacén", denunció. En ese sentido, García solicitó dotar a la zona de elementos museísticos que sirvan para amenizar la espera de quienes esperan por su turno "porque no todos van al museo" construido unos metros más adelante. García, además, planteó la posibilidad de sacar a licitación la cafetería del centro, "que lleva 30 años sin utilizarse". Felgueres y García pretenden que el Gobierno "dé vida y ofrezca una imagen agradable" a quienes visitan la joya riosellana.