El Gobierno socialista de Piloña ha sacado adelante la ordenanza fiscal reguladora de la tasa por utilización privativa o aprovechamiento especial de los bienes de uso o dominio público titularidad municipal. O lo que es lo mismo, tiene luz verde para cobrarle una tasa a las compañías eléctricas que utilicen el territorio piloñés para extender su red. El Boletín Oficial del Principado de Asturias (BOPA) daba ayer por finiquitado el último paso del proceso para aprobar el cobro y, de este modo, a partir del 1 de enero el Gobierno podrá aplicar la norma y poner en marcha el cobro por las instalaciones de transporte de energía eléctrica, gas, agua e hidrocarburos que se beneficien del territorio piloñés para sacar un beneficio de la empresa a la que pertenezca el servicio. Aunque el alcalde, Iván Allende, no se atreve aún a dar una cifra, lo que está claro es que la recaudación contribuirá de forma positiva a incrementar el presupuesto municipal de los próximos años que redundará en el beneficio de todos los piloñeses.
La medida, que ya se ha aprobado en otros concejos de la comarca, afectará a "personas físicas o jurídicas, sociedades civiles, comunidades de bienes y demás entidades que lleven a cabo la utilización privativa, o se beneficien de algún modo, del dominio público local". Las tarifas se especifican en una tabla donde se estipulará de forma oficial el precio a pagar. La tasa, según la normativa vigente, se gravará a instalaciones como torres, soportes, postes, tuberías, líneas, conductores o repetidores.
