Dos años después de haber creado unas pastas a base de maíz, trigo, manzana y chocolate, en el obrador El Pindal, una empresa vinculada al municipio de Ribadedeva, podrán producir y comercializar el dulce. La marca, de nombre "Indianitos", representa a la Red de Municipios Indianos de la cornisa cantábrica, y fue cedida ayer de forma oficial por la entidad a la empresa en un acto protocolario que tuvo lugar en el Ayuntamiento de Ribadedeva.

El empresario que acaba de asumir los derechos de la marca decidirá ahora el precio. No tiene limitación territorial para comercializarlo, pero sí tendrá una temporal. Según el acuerdo, la Red de Municipios le ha cedido los derechos durante los próximos diez años. Además, deberá crear un logotipo "usando una serigrafía determinada" que deberá ir en el empaquetado, donde también figurará el logo de la asociación de municipios indianos del Cantábrico.

"La marca fue creada en el marco del desarrollo de una política de promoción de la cultura indiana, elemento común del pasado de los ayuntamientos que forman parte de la asociación", aseguran. Y a eso aspira el dulce, a recordar el pasado indiano.