La guerra política entre VecinosxLlanes, el partido del alcalde, y el PSOE, en la oposición, ha provocado la dimisión de José Alberto Concha, presidente del Consejo Social de Llanes, formado hace únicamente trece días. "He puesto mi empeño en unir a todas las fuerzas políticas de Llanes y he fracasado, por lo que presento mi dimisión irrevocable", zanja Concha en lo que describe como "un acto de coherencia". Los miembros del Consejo, reunidos ayer, solicitaron por aclamación a Concha que se mantenga en el cargo.
En un principio, el Consejo Social de Llanes fue concebido como un foro de participación de partidos, empresarios, sindicatos y colectivos de diferentes ámbitos para buscar salidas locales a la crisis que se avecina a cuenta de la pandemia. La representación política corre a cargo del PSOE, en la oposición; Foro y PP (ambos miembros del gobierno local), Podemos e IU, esta última en la figura de la presidenta local. La edil no adscrita Priscila Alonso, que concurrió a las elecciones bajo las siglas de IU y fue expulsada por no facilitar el gobierno del PSOE, se desmarcó del Consejo, que cree debería estar libre de figuras políticas. Tampoco está VecinosxLlanes, que opina que el organismo nuevo sobra e invita a los colectivos participantes en él a dirigirse directamente al ejecutivo local con sus propuestas.
José Alberto Concha, presidente de OTEA (Hostelería y Turismo de Asturias) en Llanes, ha durado en el cargo trece días y se marcha porque no quiere que la agrupación, ni su papel como cabeza visible de la misma, sea "parte del juego o el arma arrojadiza de unos contra otros". El empresario quiere alabar al resto de integrantes del Consejo, que han sabido huir de "etiquetas y banderas".
