Avanza la primavera y los paisajes de Asturias se muestran en todo su esplendor, sobre todo en jornadas como la de hoy, cuando las nubes dan tregua y permiten al sol iluminar con su luz la belleza de los rincones más sugestivos del Principado. Uno de ellos es el Picu Urriellu, también conocido como Naranco de Bulnes, enclave emblemático de los Picos de Europa que hoy luce en todo su apogeo.

Una belleza que tan solo pueden disfrutar estos días los habitantes de esta privilegiada zona situada en el concejo de Cabrales. El estado de alarma que obliga al confinamiento por la pandemia del coronavirus impide que lleguen turistas a visitar uno de los paisajes más icónicos y reconocibles de Asturias. Un lugar al que tampoco pueden acceder ahora los escaladores que tienen en ese lugar uno de sus retos preferidos en la práctica de este deporte. La imagen que acompaña esta información, tomada por uno de los habitantes que pueden divisar toda esa belleza al asomarse a la ventana, Gerardo Meiriño, sirve como consuelo hasta que se pueda volver a pisar uno de los rincones más bellos del paraíso.