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La reordenación de Covadonga incluirá la peatonalización de la explanada de la basílica

Principado, Cangas de Onís y Cabildo acuerdan crear un nuevo aparcamiento en el santuario para compensar la pérdida de cincuenta plazas

Gerardo López, Carlos González, Jorge García, José Manuel González, Adolfo Mariño y José Manuel Caldevilla, ayer en la explanada. EVA SAN ROMÁN

La reordenación de Covadonga dejará ya este mismo verano como "uso exclusivo de los peatones" la explanada del santuario, pero además prevé la creación de un nuevo aparcamiento para reubicar, e incluso aumentar en número, las cincuenta plazas que se pierden al cambiar el uso de la antesala del templo.

Y así, "con esta solución, habrá un antes y un después en el santuario. Antes era un caos circulatorio, y después será un lugar realzado en beneficio de vecinos, visitantes, peregrinos y turistas". El abad de Covadonga, Adolfo Mariño, aplaude así la decisión que han tomado, de forma consensuada, el Gobierno del Principado de Asturias, el Ayuntamiento de Cangas de Onís y el propio Cabildo.

Cuando las obras que ahora se ejecutan (con un presupuesto de 354.221,85 euros) concluyan, a principios de julio, "conoceremos otra Covadonga, donde la gente podrá pasear tranquilamente sin estar pendiente de salvar obstáculos o que les atropelle un coche. Incluso para la espiritualidad vendrá bien, disminuiremos los decibelios de los vehículos y aumentaremos el silencio. Los que vienen podrán disfrutar de una manera distinta" del santuario, resumía el abad al término de una reunión con representantes del Ejecutivo regional, miembros del Consorcio de Transportes de Asturias y el alcalde de Cangas de Onís. El primer edil, José Manuel González, alabó "la buena voluntad y coordinación" de las partes implicadas, que han sabido llegar a un acuerdo que tenía "desde hace muchos años el objetivo de reordenar Covadonga y liberarla de coches".

El director de Movilidad, Jorge García, matizó que si bien la explanada será de uso peatonal y se colocarán unas barreras que prohiban el paso fluido de vehículos, también se posibilitará la entrada puntual de coches para atender emergencias sanitarias o ceremonias en la basílica, "tipo bodas".

El alcalde de Cangas de Onís abundó en que la decisión que ayer se acordó en el Real Sitio "será un paso muy importante para embellecer" este espacio, pero también "una mejora del tránsito" que no implica perder plazas de aparcamiento, puesto que se ganarán en la zona del antiguo cuartel. Se trata de un lugar en donde de forma habitual estacionaban los autobuses que acudían con grupos al santuario. Ahora, tal como explicó el regidor, esos vehículos descargarán a los ocupantes junto a la explanada y deberán abandonar la zona para estacionar en los aparcamientos de la parte baja.

El cambio de Covadonga será también físico, pues los materiales de la obra prevén dejar con una explanada más integrada con el entorno en el que se ubica.

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