Las trabajadoras sociales de la mancomunidad Llanes-Ribadedeva se han sentado con los gestores del ente supramunicipal para negociar la mejora de sus derechos laborales. Si no logran un acuerdo retomarán las huelgas que habían anunciado antes del inicio del estado de alarma. Quieren un convenio colectivo propio, así como la redacción de una Relación de Puestos de Trabajo que afiance sus empleos y elimine la discriminación salarial y laboral que dicen sufrir junto a la sobrecarga laboral a la que están sometidas. La mesa negociadora se inició ayer. E.S.R.