La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Las deficientes comunicaciones y los atascos desesperan a los empresarios de Vega

Los negocios del entorno de la playa de Ribadesella reclaman más control del Ayuntamiento: "Vivimos situaciones surrealistas"

Coches y bañistas, ayer en la entrada de la playa de Vega. EVA SAN ROMÁN

Ribadesella tiene una cuenta pendiente con Vega. Lo creen sus vecinos, y también los empresarios que trabajan en el entorno del arenal más grande del concejo, donde la actividad hostelera no cesa. La situación, cada verano, "es tercermundista", denuncian, y las restricciones limitando la llegada de conductores al número de plazas de aparcamiento "no está bien gestionada". Los coches han de abandonar el parking a las nueve de la noche "y se van todos a la vez, así que hay atasco para llegar y para marchar", dicen los hosteleros.

Pero el último escollo que los empresarios han tenido que superar en cuanto a telecomunicaciones ha sido el acceso a internet y a la señal de televisión. Y siguen en ello. "Tuvimos que dejar de cobrar a varios clientes porque ahora, mucho más que antes, la gente sólo utiliza tarjeta y el datáfono no funcionaba", explica Hugo Batalla, de La Tiendina de Vega. Hace dos días estuvieron "más de un cuarto de hora explicando a un cliente qué tipos de quesos, vinos o embutidos tenían para, al final, no poder cobrarle por un 'error en las comunicaciones' tal como indicaba el datáfono", lamenta. Por ahora, el problema "se ha solucionado de forma provisional, pero deberían hacer algo de forma definitiva, no podemos arriesgarnos a estar así una y otra vez", insiste.

Y su visión la apoya Luisa Cajigal que, con cuatro negocios y una oficina administrativa en Vega, sufre diariamente "situaciones que son surrealistas e infumables". "Lo que no puede ser es que nos obliguen a tener cámaras de seguridad y se caigan cada dos por tres, que no podamos ofrecer un servicio de wifi a los clientes o que tengamos problemas en los cobros en plena temporada turística", indica. "No sé de quién es la culpa, yo sé que pago un servicio que no funciona y no puede ser", abunda. Ella trabaja en la zona durante todo el año, "y siempre hay problemas", aunque estos se intensifican durante el verano.

"No hay absolutamente ningún control por parte del Ayuntamiento. La Policía Local aquí viene a primera hora, cuando todo está tranquilo, pero la gente se salta las señales, lleva mascarilla, quien la lleva, y estamos como ves", dice indicando una caravana de vehículos parados mientras "un sólo operario" coge las matrículas para darles entrada en el aparcamiento de pago, el más cercano al arenal. "No puede ser, es una cuestión de sentido común, aquí hace falta más personal", indica.

Y también más ideas. Agustina Aciar regenta un bar de comidas y un chiringuito "donde no podemos poner ni música porque no tenemos señal de wifi, y es algo básico". Aciar apunta, además, la necesidad de regular "la pernocta de caravanas en Vega".

Compartir el artículo

stats