Los ataques del lobo no dan tregua. Este fin de semana los daños se registraron en los concejos de Onís y de Ponga. En el primer caso, un ganadero de La Robellada encontró totalmente devorado a una novilla en una zona cercana a Moandi. En el municipio pongueto, Arcenorio fue el escenario donde se encontró a una novilla muerta, a una vaca herida y a otra despeñada. E.S.R.