Unos cien kilos de basura recogieron ayer la veintena de voluntarios que participaron en una limpieza de residuos en la playa de San Antolín. Casi todo “cosas pequeñitas” que la gente va tirando por inercia, como colillas, plásticos, botellas, latas, envases, papel albal... Muchos pequeños residuos que van contaminando el medio.

La actividad estaba en marcada en el concurso nacional #MiPlayaSinPlásticos, que se desarrolló en doce playas del país. La cofradía de pescadores Santa Ana de Llanes presentó su propuesta, la de la playa de San Antolín, y 65.000 personas votaron la idea, lo que le colocó en segundo lugar del certamen. La iniciativa, impulsada por dos empresas privadas en colaboración con la ONG “Paisaje Limpio”, persigue “concienciar sobre la necesidad de actuar ante el abandono de residuos”, indicaba una de las voluntarias, Maiche Perela.

“Hemos encontrado, bajo el puente, dos vertederos con somieres y colchones, incluso”, y además de la línea de mar y la orilla del río Bedón, que desemboca en el arenal llanisco, recogieron residuos en la senda costera. “Hemos planteado al edil de Turismo, Iván García, que esta iniciativa se traslade al concejo, de forma eventual, para implicar a vecinos y niños”, avanzó Perela. Su idea pasa por retirar desechos “también en los pueblos del interior”, algo que “el concejal ha visto con buenos ojos”, asegura. “Debemos educar a los niños y por eso hay que organizar este tipo de actos los fines de semana”, explica.