Llevaban “casi dos meses” trabajando sin luz y “unos cuatro años” solicitando “con urgencia” un cambio en la instalación eléctrica. Los pescadores que pertenecen a la Cofradía Santa Ana de Llanes celebran que, al fin, el Gobierno del Principado de Asturias haya atendido sus peticiones y las ansiadas torretas para iluminar la dársena interior del puerto pesquero vayan a ser instaladas “dentro de muy poco tiempo”.
El patrón mayor, Ángel Batalla, aplaudía ayer la iniciativa gubernamental, aunque “haya tenido que llegar después de ejercer tanta presión social”. Al final, evidenciaba el pescador: “Si no te quejas, no te atienden”. Han tenido que pasar años para que esas protestas hayan sido atendidas.
“Instalarán seis torretas de led y nos pondrán una instalación totalmente nueva, es más de lo que pedíamos”, pero no menos de lo que merecen. Los pescadores salían cada madrugada a faenar a oscuras debido al mal estado de la instalación que ayer comenzó a retirarse. Los golpes de mar, la lluvia e incluso el viento dañaban un sistema obsoleto que “fueron arreglando poniendo parches, literalmente, con cinta aislante”. El tiempo acrecentó ese problema y los marineros pedían de forma insistente al Gobierno regional un “mínimo de seguridad” para evitar accidentes. A menudo acudieron a trabajar con linternas, luces de móvil e incluso velas, y advertían de la posibilidad de que alguien sufriera las consecuencias físicas de “trabajar sin luz”.
Finalmente no hubo que lamentar percances graves y solucionar sus problemas tendrá un coste “estimado” de 45.270 euros y un plazo aproximado de ejecución de mes y medio. Al menos así lo anunciaron durante la tarde de ayer desde la Consejería de Medio Rural y Cohesión Territorial que dirige Alejandro Calvo. “Por el momento se han comenzado a retirar los báculos y otros elementos deteriorados para garantizar la seguridad de los usuarios del puerto”, han evidenciado. La actuación, que mantendrá el número de puntos de suministro eléctrico que ahora emplea la cofradía, “garantizará también la energía eléctrica para la embarcación Salvamar” y los planes del Gobierno regional pasan por incluir en esta actuación una segunda fase que prevé “la mejora de la iluminación que alcanzará a los Cubos de la Memoria y al espigón del puerto”.
El pasado 15 de enero, en una visita a Ribadesella, la directora general de Infraestructuras Viarias y Portuarias del Principado, Esther Díaz, avanzó que algunos técnicos ya estaban estudiando de qué manera solucionar los problemas que se repetían en el puerto de Llanes o, al menos, encontrar el porqué de los fallos que dejaban sin suministro eléctrico a los marineros. Sin embargo, durante todo ese tiempo y pese a reconocer que el problema existía, los pescadores siguieron yendo a trabajar a oscuras. “La luz se iba con los temporales, hacía cortocircuitos en algún sitio de la instalación, pero luego volvía”, recuerda Batalla. Sin embargo, “desde que se fue en diciembre del año pasado, nunca más volvimos a tener luz y así estuvimos trabajando, como pudimos”, lamentaba el pescador.
Batalla ve con buenos ojos el proyecto que comienza. Aunque aún quedan muchas iniciativas por atender de los pescadores, como mejorar los amarres en el Campo del Gato, donde los barcos han de resguardarse con las mareas vivas. La logística no acaba de convencer a los pescadores por ser una estructura insegura y, cuando baja la marea, propicia el hundimiento de los barcos.
