A Isabel Gutiérrez Novo (Pancar, Llanes, 1980) siempre le gustó escribir. Le sonaba bien la cadencia de la poesía e incluso estuvo tentada a estudiar Periodismo por aquello de dedicarse a las letras. Finalmente optó por hacer Relaciones Laborales y dedicar su tiempo libre, cada vez más limitado, a escribir algún verso suelto.
Nunca dejó de perfeccionar su técnica, aquella que inició “siendo adolescente” con rimas “más formales”. Leer le ayudó a crecer. Y no desistir la llevó a ser la segunda en el VIII Premio internacional de poesía “Jovellanos-El Mejor Poema del Mundo”. “Se presentaron unos 2.700 poemas y es gratificante saber que el tuyo es uno de los mejores, te anima a escribir más” y a pensar que un día, quién sabe, dice, pueda publicar un poemario.
“Este concurso te permite presentar un solo poema y eso lo facilita a gente como yo, que no tiene mucho tiempo”, indica. Y, además, “permite hacerlo en cualquier lengua o dialecto” y ella eligió el asturiano, “el que aprendí en casa”, porque a sus 40 años no tuvo la ocasión de “estudiarlo en el colegio”.
El poema ganador se llama “Facer güecu” y habla del espacio que ocupan las experiencias. De la mochila que lleva cada uno, que cada vez es mayor, explica. Necesitamos hueco para dar la importancia que les corresponde a todas ellas, añade. Y también habla de que, a veces, en el viaje, “no eres viajera sino trayecto”, narra.
