“Un privilegio”, así considera el Ayuntamiento de Llanes la representación del concejo que protagonizará Aníbal González Anca en las próximos –y esperados– Juegos Olímpicos de Tokio, que se celebran este año. Y así mismo lo define también el llanisco, que se deshizo en agradecimientos al lugar que le vio crecer durante la recepción organizada ayer en el Consistorio.

Rodeado del cariño y el apoyo de sus amigos y familiares, el preparador físico, de 32 años, recibió por parte del alcalde llanisco, Enrique Riestra, y de los concejales Iván García y Lucio Carriles, una bandera del concejo, con el encargo de lucirla en la ceremonia de entrega de medallas, a la que están seguros de que asistirá, pues auguran que la selección de fútbol de México, de la que es el preparador físico, logrará una presea.

González recordó sus inicios en los dos equipos llaniscos: el Club Deportivo Llanes y el Urraca Club de Fútbol. En este último fue donde comenzó su andadura como preparador físico, ocupación que desarrolla ahora en la selección nacional del país azteca, lo que le ha llevado hasta los juegos de Japón, un país que ya conoce.

Además de formar parte, en sus inicios, de las plantillas del Villarreal y del Real Oviedo, Aníbal González desarrolló parte de su carrera como preparador físico en el Rayo Vallecano, el mexicano Cimarrones de Sonora y el japonés Tukushima Vortis. Natural de La Pereda, González partirá pronto para Tokio con la ilusión de traer una medalla a casa y presumiendo de orígenes: “Siempre que me preguntan de dónde soy digo que del mejor sitio del mundo”.