El equipo municipal de gobierno de Llanes iniciará las obras del proyecto integral de seguridad en la entrada del colegio Valdellera de Posada en cuanto termine el curso escolar, en junio, para ejecutarlo durante las vacaciones y que esté listo para cuando se reanuden las clases, en septiembre. Los dirigentes locales quieren así “poner punto y final a un grave problema que lleva décadas sin solucionarse”. Para ello ha redactado un proyecto integral de seguridad y ha consignado una partida económica de 110.000 euros que se llevará al próximo pleno municipal, que se celebrará la próxima semana, con el objeto de contar con el visto bueno de la Corporación.

El proyecto integral de seguridad del colegio público Valdellera de Posada incluye la construcción de una acera más amplia, la renovación del alumbrado público en esta zona, la instalación de dos reductores de velocidad así como el refuerzo de las señales verticales y horizontales de circulación.

Esta actuación forma parte de las medidas diseñadas desde el Consistorio con el propósito de mejorar y aumentar la seguridad de toda la comunidad escolar en el entorno del centro docente.

La actuación prevé el derribo del actual muro para ganar 3 metros de ancho y crear una acera de 4 metros en un tramo de 100 metros de longitud. Habrá un segundo tramo de unos 60 metros donde la acera tendrá una anchura de unos 2 metros. Para complementar estas medidas, se cambiará el alumbrado público de esta zona, se colocarán dos reductores de velocidad para que los vehículos se vean obligados a respetar los límites de velocidad y se reforzarán las señales horizontales y verticales.

De manera paralela, el Consistorio trabaja en la creación de un nuevo aparcamiento en la zona para evitar acumulaciones de coches junto al colegio. El objetivo es procurar una mayor seguridad en los movimientos diarios en el centro escolar de Posada, aumentando las precauciones para tranquilidad de niños, padres, profesores y resto de la comunidad escolar.