El tren es el único transporte público colectivo al que tienen acceso los vecinos de la localidad parraguesa de Toraño. Por eso reclaman la regularidad del servicio.

Se quejan de la “impuntualidad” de los trenes y, sobre todo, de la suspensión “frecuente” del servicio sin recibir información. El pasado lunes volvió a pasar el tren “tras 18 días sin él”.

Aseguran que el mal tiempo es la causa a veces, pero en este caso los trenes de mercancías “siguieron pasando, los de pasajeros no”, comentó la vecina Charo Pascual, que aseguró que Adif (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias) realiza un “buen mantenimiento de las vías para que no pase el tren”. dijo.

Tienen que hablar con Renfe para que pongan un taxi hasta donde se coge el autobús que se habilita cuando se corta el trayecto Oviedo-Santander, “pero tenemos que llamar varias veces para que lo hagan”. Del pueblo hasta el bus hay más de 1,5 kilómetros sin alumbrado y sin arcén. “No podemos ir caminando, cargados, lloviendo y sin luz. Aquí viven personas mayores sin coche”, dijeron.

Bea Alfaro es madre de dos chicos que han tenido que desistir de usar el tren debido a su impuntualidad. “No llegan al cole. A veces sacan el billete y no pasa”, explica la afectada.