Vecinos de la localidad de Las Rozas de Villanueva, en Cangas de Onís, se concentraron ayer para reclamar un paso en condiciones de seguridad para los peatones de la localidad. Piden además que los vehículos que pasen por la zona respeten la velocidad debida para un tramo de carácter urbano, esto es, 50 kilómetros por hora.

Es un tramo de la carretera Nacional 625, en el tramo que une Arriondas (Parres) y la capital canguesa, el que pasa por la zona y registra un elevado tráfico que, además, no suele cumplir la limitación de velocidad correspondiente.

El pueblo se distribuye a ambos lados de la carretera y tienen un único paso de cebra para cruzar, por el que los vecinos señalan que es difícil pasar sin que sea peligroso, sobre todo en verano, cuando el volumen de tráfico es aún más elevado y se suceden las situaciones de velocidades excesivas.

Los vecinos, con silbatos y pancartas, protestaron cerca del punto de cruce, sin llegar a cortar la circulación. El objetivo, inciden, es contar con un lugar seguro por el que cruzar y que se tomen medidas para el efectivo cumplimiento de la limitación de velocidad a 50 kilómetros por hora en el tramo que atraviesa la localidad.