Porrúa analiza el desarrollo del proyecto piloto autonómico "Aldea 0"

Los vecinos de Porrúa, en Llanes, analizaron esta mañana en el Museo Etnográfico del Oriente de Asturias la evolución del proyecto piloto "Aldea 0" cuyo objetivo es mantener el conocimiento tradicional no disponible en los sistemas de educación formal buscando hacer de estos lugares espacios de futuro en los que vivir y trabajar. Lo hicieron junto a los representantes del Principado de Asturias y del Centro Tecnológico de la Información y la Comunicación (CTIC), impulsores de la iniciativa que se desarrolla también en Moal (Cangas del Narcea), Asiego (Cabrales) y Peón (Villaviciosa).

"Lo que se busca es que todo ese conocimiento acumulado a los largo de siglos y ahora en peligro de extinción puede hacerse visible para cualquiera que esté interesado. Estamos en la última generación campesina que domina y pone en práctica una cultura de siglos que tiene un valor incalculable, no sólo culturalmente, sino también económicamente", explicó Emilio Tereñes, investigador de CTIC responsable del proyecto.

Y en Porrúa ya trabajan en cómo conservar para siempre ese conocimiento. Para ello han contado con Pablo Casanueva, realizador audiovisual y documentalista de la zona, que trabaja con los vecinos en una herramienta tecnológica que permita divulgar la cultura del lugar. Está en fase de producción pero "servirá de ejemplo de cómo abordar la recopilación de información asociada a la aldea y del atractivo que puede suponer de cara a revalorizarla".

En ese sentido, el presidente de la Asociación Cultural "Llacín", Gerardo Gutiérrez Romano, destacó que fue una idea "muy bien recibida" por los vecinos "a la cuál aportaron matices y propusieron nuevas funcionalidades, como la de contar con un foro, que sirviese para facilitar el funcionamiento de los grupos locales". Además, detalló, que las personas implicadas han ido validando todo el desarrollo tecnológico "para asegurar que se ajustaba a las necesidades propuestas".

Al encuentro asistió también Yolanda Cerra, antropóloga y miembro del patronato del Museo Etnográfico del Oriente de Asturias, Jaime Izquierdo, comisionado para el Reto Demográfico, y Pablo Priesca, director general de la Fundación CTIC, quien destacó "la importancia de la hibridación tecnología-innovación social para mejorar la experiencia en la realidad física apoyando la divulgación de la cultura local como forma de promover el orgullo de pertenencia de los habitantes de una comunidad".

También Izquierdo puso en valor el papel de la cultura como elemento vertebrador de los sistemas socioeconómicos de la aldea poniendo el foco de atención en "la importancia del empoderamiento de la comunidad local a través de procesos participativos como el que se está desarrollando en Porrúa". En este sentido, subrayó el valor del proyecto para "pasar de la aldea del pasado o del presente a la aldea del futuro".

Los agentes implicados en el proyecto "Aldea 0" destacaron asimismo "la gran dinamización sociocultural" de esta localidad llanisca que la convierte en el espacio "idóneo" para poner en marcha esta iniciativa piloto, en la que los vecinos están teniendo un importante papel como conservadores de las tradiciones de la comunidad en la que habitan. Buscan conceptualizar cómo deben ser las aldeas del siglo XXI para generar modelos que sean replicables en otras partes del territorio.