Tuvieron que huir de su casa de noche en Piloña: "Había mucho humo, el fuego cerca y decidimos marcharnos"

Darren Todd, vecino de La Carabaña, en Piloña, regresó en la mañana de este viernes a su casa tras ver muy cerca las llamas durante la tarde-noche anterior. El fuego llegó a unos treinta metros de su propiedad. Con un amigo asmático en casa y las llamas a la vista, decidieron este jueves hacia las ocho de la tarde que lo más prudente era marcharse.

"El fuego estaba muy cerca y había mucho humo, cogí las cosas importantes y nos fuimos", comentó el vecino, conocido como el "jardinero inglés" en Piloña por su profesión y origen. Regresaron por la mañana el viernes y se pusieron a limpiar maleza del entorno y a enfriar el terreno con una manguera. Los bomberos estuvieron toda la noche trabajando en el incendio que afectó a las dos caras de la montaña, entre Nava y Piloña. Una zona que ya acumula 48 horas en vilo. Cuando todo parecía más tranquilo este viernes, un fuerte viento se levantó en torno al mediodía y reavivó el fuego en la zona de monte sobre Santana de la Maza (Piloña), donde la gran nube de humo y las llamas se veían desde la distancia. Los efectivos desplazados se centraron en evitar su llegada al pueblo.

Muy cerca de la Carabaña, lindando con la carretera N-634 y en el concejo de Nava, se encuentran la nave de Muebles Balbín y una residencia geriátrica. El fuego no les afectó, pero se veían las llamas y el humo desde ambos edificios y la situación llegó a inquietarles. Tampoco fue una noche tranquila para los vecinos del otro lado de la montaña. Las localidades de Beroñes y Bierces vieron correr el fuego hasta unos escasos cincuenta metros de las viviendas. Las llamas llegaron hasta la propia carretera que une ambas localidades. "Hubo más incendios grandes, pero tan cerca del pueblo no", comentó Isidoro Peruyero. Él, junto a otros tres vecinos, estuvieron limpiando en una zona cercanas a las casas matorral ante la cercanía de las llamas la tarde noche del día de antes.

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Tuvieron que avisar a los responsables de una empresa maderera que tenía máquinas en el monte para que las sacasen de allí. "Estaba el fuego al lado de la maquinaria y los llamamos", comentó Marisa Álvarez, que reconoce que la noche, viendo que se acercaban las llamas y con un fuerte olor a quemado, fue complicada. El día anterior lo fue en La Motosa, donde llegó a quemarse un hórreo.

La empresa maderera consiguió sacar las máquinas tras el aviso de José Luis Cabello, otro de los vecinos de Beroñes. El alcalde, Iván Allende, estuvo hasta bien entrada la madrugada en los puntos críticos del concejo. "Es desolador y no se puede permitir esto. Es injustificable y más donde hay vecinos y viviendas", dijo el alcalde señalando la clara intencionalidad de las quemas. Allende explicó que prendió la masa forestal y, además del daño a los pueblos y los vecinos y el valor medioambiental, la acción afectará también en lo económico, puesto que son zonas donde se realiza el aprovechamiento maderero que luego revierte en obras para estas localidades. Este viernes volvió a visitar las localidades más afectadas por las llamas.

Santana de Maza, Beroñes, Ques, Bierces, La Motosa, La Carabaña y Curuxeu están siendo las zonas más golpeadas por los incendios en el concejo de Piloña. El Vicepresidente, Juan Cofiño, y la Consejera de Presidencia, Rita Camblor, visitaron por la tarde las labores de extinción en el concejo oriental.  

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