La Asturias misionera canta en Covadonga

Más de doscientos jóvenes se congregaron este sábado en Covadonga con motivo del XVIII "Festival de la Canción Misionera" organizado por la Delegación episcopal de Misiones. Una jornada de convivencia en torno a la música, el espíritu solidario y la fe que atrajo al santuario de la Santina a las juventudes misioneras de una decena de colegios y parroquias procedentes de Avilés, Gijón, Oviedo, Mieres, Piedras Blancas y Noreña.

Se trata de la primera vez que este evento musical cristiano tiene lugar en la Basílica de Santa María la Real, un hecho histórico que celebran con orgullo desde la organización: "La jornada es un ya éxito por la cantidad de gente que ha venido a pesar de ser sábado", señaló Rodrigo Alperi. "Tenemos un concurso de canto con premios, juegos y salidas organizadas a la Santa Cueva", explicó.

La alegría es compartida por el Abad, Adolfo Mariño, muy contento con la celebración del evento junto al hogar de la Santina a la que considera, la primera evangelizadora: "Los niños también son misioneros y evangelizadores, nos acercan a la Iglesia. Y, al mismo tiempo hay una unidad muy grande entre estos niños y aquellos de cualquier país del mundo, recordándolos y sabiendo que tienen que tender puentes entre unos y otros", apuntó.

Este año los participantes en el festival, destinado a poner voz a la labor misionera de la Iglesia, colaboran con un proyecto cuyo objetivo se centra en prevenir la desnutrición en una misión que las Hijas de la Caridad tienen en el Chad.

El certamen de la Canción Misionera fue ayer el epicentro de este encuentro musical juvenil que reunió a una decena de grupos participantes: De Avilés llegaron el Colegio Buen Consejo, el Colegio Juan Pablo II Santo Tomás, y la Unidad Pastoral La Magdalena, San Agustín y Cristo Rey Versalles; y de Gijón el Colegio Patronato San José, la Parroquia San Vicente Paul, y la Parroquia San Nicolás de Bari. También estuvieron presentes el Colegio Virgen Milagrosa de Oviedo, y las parroquias de Piedras Blancas, Noreña y El Carmen de Mieres.

Todos ilusionados tras un intenso trabajo creativo: "La idea del festival es componer una canción con música y letra o coger una canción que ya existe y cambiarle la letra. Venimos todos los años y los niños se lo pasan muy bien", explica Celeste López, de la Unidad Pastoral de Avilés. Así lo vivieron Maisy Barriento y María Arias, alumnas de ocho años del colegio avilesino Santo Tomás: "Nuestra canción se titula "Dona tu don". Tenemos muchos nervios y muchas ganas de cantarla", contaron.

Un concurso lleno de talento y compañerismo en el que hubo reconocimientos y premios para todos: "Todos los grupos ganan algo, ya sea por la mejor canción, espíritu misionero, vestuario... Lo importante hoy es participar y pasar un dia de hermandad y convivencia", destacó Alperi.

Diversión y aprendizaje en valores a partes iguales guiados por lemas que han calado entre los más pequeños, como es el caso de Lucas Flaquer, de la parroquia de Piedras Blancas: "Es muy divertido porque estás con el coro y los amigos, pero también transmitimos un mensaje. El nuestro es "no te quedes todo lo que tienes", que quiere decir que no hay que ser egoistas", explicó.

Una jornada para recordar en el Real Sitio donde resonaron las voces de cientos de niños proclamando la paz, la generosidad, la alegía y el amor. "Eso es el alma y el pulmón de la Iglesia", concluyó el Abad.