Luto en el Oriente por el fallecimiento de una de sus maestras más queridas, Luisa Azurmendi

Contaba 100 años y dedicó toda su vida profesional a la docencia: fue profesora de Educación Especial en el Colegio Don Orione, en Posada (Llanes), y se jubiló en el Colegio Reconquista de Cangas de Onís

Luísa Azurmendi, en el homenaje que le tributó el Ayuntamiento de Cangas de Onís en el marco de "Mujeres Canguesas del Año", en 2016.

Luísa Azurmendi, en el homenaje que le tributó el Ayuntamiento de Cangas de Onís en el marco de "Mujeres Canguesas del Año", en 2016. / J. M. Carbajal

J. M. Carbajal

J. M. Carbajal

"Muy buena gente". Así califican buena parte de los cangueses a María Luisa Azurmendi Fadrique, fallecida hoy, a los 100 años de edad y residente en Cangas de Onís desde la década de los sesenta del siglo pasado al contraer matrimonio con José Manuel Miranda Diego, trabajador del gremio forestal.

La dilatada vida laboral de Luisa Azurmendi estuvo dedicada a la docencia, especialmente con los escolares más vulnerables y desfavorecidos, destacando por su entrañable labor solidaria. Natural de Oviedo (24/3/1924), fue profesora de Educación Especial en el colegio Don Orione, en Posada de Llanes, y en el Colegio de Educación Infantil y Primaria Reconquista, este en la capital canguesa, donde se jubilaría en 1989. Estos últimos años residía en el hogar Beceña-González.

Su primer destino profesional como maestra, allá por los años cincuenta de la anterior centuria, fue en la aldea de Bulnes (Cabrales), en el corazón de la vertiente asturiana de los Picos de Europa, con apenas una docena de alumnos y alumnas. "Iba en tren hasta Posada de Llanes y de allí en autobús hasta Arenas de Cabrales. Después, desde Arenas andando hasta Bulnes", recordaba hace unos años en una entrevista en LA NUEVA ESPAÑA.

Se alojaba en Casa Amparo, en el mismo pueblo bulnés, y tan solo bajaba en época de vacaciones. Después de Bulnes, impartió docencia en Carangas y, más adelante, Tanda, ambos pueblos pertenecientes al concejo de Ponga. Benia de Onís; Beceña (Cangas de Onís); Sames y, Argoliviu (Amieva), Arenas de Cabrales; Ribadesella, y Pernús (Colunga), fueron otros destinos en su larga carrera por el Oriente.

El funeral se oficiará este miércoles, 6 de noviembre, en la iglesia parroquial de Santa María de la Asunción, en la ciudad de Cangas de Onís, a las 12.00 horas. Posteriormente, recibirá cristiana sepultura en el cementerio de la citada parroquia.

La capilla ardiente de la finada ha quedado instalada en la sala número 2 del Tanatorio del Oriente, en Cangas de Onís, donde se están recibiendo incontables muestras de condolencia al tratarse de una persona muy conocida y querida en la comarca y área de influencia de la vertiente asturiana de los Picos de Europa.

Tracking Pixel Contents