¿Son monjas o exmonjas las religiosas de Belorado afincadas en Asturias? Esto dice su jefe de prensa

El comunicador asegura que la comunidad seguirá "resistiendo ante la adversidad"

Las religiosas de Belorado en labores de repostería.

Las religiosas de Belorado en labores de repostería.

Ramón Díaz

Ramón Díaz

Arriondas (Parres)

Las religiosas de Belorado afincadas en Asturias continúan con las pruebas de cocina con vistas a abrir en los próximos días el restaurante Santa María del Chicu en Arriondas. Ya tienen todos los permisos, por lo que la decisión de abrir les corresponde solo a ellas. Mientras tanto, su jefe de prensa, Francisco Canals, ha abierto un debate: ¿Son monjas o exmonjas? Tanto ellas como él lo tienen muy claro.

"Las religiosas de Belorado son monjas, no son exmonjas. Porque ser monja no es algo que dependa de carreras o títulos oficiales. No existe la carrera oficial de monja, ni una licenciatura, ni un grado universitario. No existe un curso oficial del Gobierno para ser monja. Ser monja es una actitud, algo que no depende de sellos o de documentos oficiales", ha apuntado en un vídeo Canals.

"Es muy importante decir que la Iglesia conciliar o la Iglesia Vaticana, la Santa Sede no otorgan el título oficial de monja, no deciden quién es un monje o una monja. Por tanto, ellas continúan siendo monjas con todas las de la ley, aunque hayan sido excomulgadas de la Iglesia conciliar", expone Canals.

Según este periodista, ser monja implica, "sobre todo, un compromiso con Dios, una entrega espiritual. Cualquier mujer podría ser monja si así lo siente, se lo propone, es perseverante y hay una comunidad, un monasterio de clausura por ejemplo, que la quiera acoger".

El proceso para convertirse en monja, explica Canals, se inicia con el noviciado e implica superar unas etapas de formación "que da el propio monasterio, no la Iglesia conciliar" y con el tiempo acaba convirtiéndose en una monja más. "Además, cuando se convierten en monjas hay unos votos personales, una especie de compromiso muy importante con la fe, con la entrega, con la vida espiritual y con el resto de religiosas, con la comunidad", añade el periodista.

"Todo esto es mucho más importante que el hecho de que haya una iglesia te reconozca o no como tal. Ellas son monjas con todas las de la ley", insiste el comunicador, "y lo continuarán siendo siempre. Además, hay muchos ejemplos históricos documentados de monjas que se retiran de la vida conventual que siguen siéndolo, aunque no lleven esos hábitos", apunta Canals.

El periodista sostiene que en el caso de las monjas Belorado él ha comprobado que son "monjas cien por ciento. Son monjas entregadas a la vida espiritual, que viven y hablan como monjas, que rezan, que hacen oraciones y misa cada día, que se comportan como tales, que hacen referencias a Dios y que tienen todos los valores de unas religiosas de un convento de clausura".

Según el periodista, las monjas afincadas en Arriondas tienen "muchos valores personales, tienen mucho de educación religiosa, de educación emocional. Son personas que con frecuencia se documentan, leen libros, se cultivan en términos religiosos y se dedican en cuerpo y alma a la vida de monjas".

Pero Canals va aún más allá y defiende que son "clarisas, no exclarisas". ¿Por qué? "Porque Clarisa es cualquier religiosa que sigue la orden de santa Clara, y no por apartarse de la Iglesia conciliar deja de ser Clarisa".

Por último, Canals apunta que también son "religiosas, no exreligiosas como se las intenta presentar, porque eso no va vinculado al reconocimiento de una institución determinada, sino que es algo mucho más grande, que trasciende mucho más y que va vinculado a un sentimiento de pertenencia, a una identidad personal y a una actitud, sobre todo, ante la vida".

El comunicador finaliza su intervención resaltando "algo muy importante", que la comunidad de Belorado seguirá "resistiendo ante la adversidad".

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