La rotonda de Vega los Caseros, en Parres, tomada por la naturaleza

Los vecinos exigen tareas de mantenimiento en ese punto de la N-625

La rotonta parraguesa.

La rotonta parraguesa. / J. M. Carbajal

J. M. Carbajal

J. M. Carbajal

Cangas de Onís

La glorieta de Vega los Caseros, en la carretera N-625 (antaño denominada León-Santander por Cangas de Onís), en término municipal de Parres, y al mismo tiempo principal acceso hacia la entrada del Parador de Turismo "Monasterio de San Pedro de Villanueva", este en término municipal de Cangas de Onís, presenta falta de visibilidad para los conductores debido a la altura que tomó el césped de la misma en las fechas primaverales.

La actuación, toda una histórica reivindicación vecinal, se ejecutó meses atrás y el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible invirtió en ella la cantidad de 325.000 euros, con el objetivo de transformar la anterior raqueta abierta en una glorieta cerrada. Cierto es que se mejoró la seguridad vial en ese punto de la Nacional, pero a la vista queda la falta de mantenimiento o dejadez en ese lugar y el consiguiente peligro que conlleva.

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