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Pediatra en el Hospital de Arriondas

Los veinte años del Hospital de Arriondas

La excelente cocina del centro sanitario del Oriente

Después de casi dos semanas y varios artículos periodísticos, me gustaría contar mi historia del vigésimo aniversario del Hospital del Oriente. De la parte institucional, una conmemoración bastante pobre. Es cierto que el equipo directivo es relativamente nuevo y tiene otras ocupaciones. Sobraron figurantes. El discurso del señor Carcedo resultó soporífero y el de el doctor Riera fue más que correcto. Pero emocionó a los anónimos que estábamos allí entre el público el del doctor Suárez. Quizás porque compartimos una parte importante de la historia del HOA, en la que desde "bandos" distintos, peleamos mucho por convertirlo en un magnífico hospital comarcal. Quizás por eso sorprende las oportunidades que ha dejado pasar, desde puestos de enorme peso en la Organización Sanitaria, para aportar soluciones a este y otros problemas, haciendo uso de su probada capacidad.

Con todo, lo más remarcable de los eventos institucionales fue la cocina. Y no sólo por los excelentes invitados Estrella Michelin, a los que agradecemos de corazón su aportación. Sino porque, sobre todo, sirvió para recordarnos a todos, y contarlo a los cuatro vientos, el excelente equipo de cocina con que contamos en el HOA. A mí personalmente me hacen pensar en la cocina de posguerra que escuché contar a mi abuela. Que con unas patatas y un puñado de grelos hacían un guiso exquisito para toda la familia, y aun lo estiraban para algún invitado. Son sin duda, cada día del año y con mucho esfuerzo, nuestros Ángeles de la Guarda. Por eso desde aquí un millón de gracias a todas.

De la parte festiva destacar que se respiró buen rollo a raudales, que hubo viejos compañeros a los que nos encantó reencontrar. Y alguna visita de sobra, para mi gusto? pero al estilo de los niños, eso se arregla con un "no te ajunto". Cada uno va a donde le parece, qué duda cabe.

El hecho cierto es que terminó la fiesta. Y que en la prensa se habló mucho del pasado, y poco del futuro. Y toca afrontarlo.

Porque hay escollos importantes para que el HOA continúe su andadura con éxito, y deberíamos ser piña una vez más, usuarios y trabajadores, o trabajadores y usuarios, para conseguirlo.

Y me atrevo a lanzar desde aquí un ruego al gerente del Sespa, señor Riera, que en su discurso demostró su afecto por este área Sanitaria. Escuche las voces que hablan de los serios problemas de cobertura sanitaria en las alas de Asturias. Dé un paso al frente y lidere con acierto a sus equipos directivos para que también las escuchen. Cuente con la opinión de los pacientes y los trabajadores y atrévase a ser innovador. Y sobre todo recuerde que un asturiano es igual en Amieva, Caravia, Gijón o Siero. Tome decisiones valientes y apueste por este Hospital, seguro que no le defraudará.

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