Creando pueblo

Por quinto año, el Ayuntamiento de Onís convoca el concurso de poesía Memorial Francisco de la Vega y lo hace bajo el lema "Ecos del pueblo".

Y yo no sé si os acordáis de aquella vez que hubo pandemia y los pueblos se convirtieron en la envidia de toda ciudad. No sé si recordáis que, de golpe, vivir en la España Vaciada era lo mejor que podía pasarte.

Se creó en los estudios de las calles más cools de nuestras urbes una nueva tendencia que seguir: la ruralfashion, pueblos con buena cobertura por si el repartidor (subcontratado) de Amazon tiene que llamar, y casas en fincas cerradas con setos bien grandes, no vaya a ser que algún vecino nos vea y le de por saludar o pedir una planta.

Porque Dios nos libre de no convertir los pueblos en urbanizaciones: ¡Vive en El Pedrosu y siéntete en Somosaguas!

Se olvidó en aquellos estudios de 700 euros/mes (probablemente por la mala ventilación), que el pueblo nunca es sólo el territorio; el pueblo, es la gente que camina una tierra: es Tomás, que se apoyaba en la portilla a darte conversación, y es Pili, con el portal abierto a todo el que llegue a la Plazuela.

Y es también la transmisión de los conocimientos, de la cultura que nos baña y de las peculiaridades que nos distinguen y, por tanto, la necesidad de crecer (sí) pero crecer como pueblo, con gente como Ela, que les enseña a sus hijos inglés y polaco, mientras que ellos aprenden asturianu con Enriquín en la nave o con Pepín en la Torraya.

Con la casa abierta: entrelazando experiencias.

Por eso, el de este año me parece un tema tan extraordinario para el concurso, porque quiere poner en relieve la importancia de los pueblos en nuestro crecimiento como sociedad y divagar sobre transformación de los mismos. Porque hacer políticas culturales es enseñar lo que somos y lo que queremos ser. Y es, también, educar.

En Onís se apuesta un año más por la que se está convirtiendo en una cita incuestionable en el ámbito cultural, homenajeando al poeta y poniendo su pequeña estela en el proyecto "Asturias, capital mundial de la poesía". Hasta el próximo 30 de abril se recibirán poemas en castellano y llingua asturiana, para seguir creando pueblo sobre territorio con huellas.

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