Salomé SUÁREZ
Unos tres minutos es el tiempo que tarda un tren de Feve desde el nuevo apeadero de Vallobín, inaugurado ayer, hasta la estación del Norte. El precio: 1,20 euros; 75 céntimos usando un bono. Los vecinos que acudieron ayer al acto inaugural se alegraron de contar con esta nueva opción de transporte, algunos lamentaron las estrecheces de un andén colapsado en ese momento por políticos y prensa, y otros se animaron a realizar el primer recorrido hasta Uría, gratuito para la ocasión.
La obra, cofinanciada a partes iguales por Feve y el Ayuntamiento de Oviedo, ha requerido una inversión de 800.000 euros y está vinculada a una amplia operación urbanística que comenzó con la construcción de la losa para soterrar la antigua playa de vías y los terrenos liberados tras la desaparición de los viejos talleres que Renfe tenía en el barrio y que ha incluido también la ampliación de la glorieta de distribución de tráfico de Alejandro Casona y Vázquez de Mella y la promoción de 460 viviendas. De la losa arranca, además, el nuevo vial hacia San Claudio.
Actualmente, el andén del apeadero, de 104 metros de longitud, permite acceder a una única vía, aunque está preparado para un futuro desdoblamiento. En el exterior, un pequeño edificio de recepción, comunicado con el andén con escalera y ascensor, alberga las máquinas de autoventa de billetes y el sistema de control de accesos, uno de ellos adecuado para personas con movilidad reducida. El apeadero, en el tramo Oviedo-Trubia, se encuentra sujeto a los horarios y frecuencias de la línea Oviedo-San Esteban, que cuenta con un tren cada hora entre las 06.20 y las 21.30 horas.
Al acto inaugural asistieron ayer el alcalde, Gabino de Lorenzo, que llegó con retraso procedente del Pleno municipal; el presidente de Feve, Ángel Villalba; el delegado del Gobierno en Asturias, Antonio Trevín; el consejero de Infraestructuras del Principado, Francisco González Buendía, y la portavoz socialista en el Ayuntamiento ovetense, Paloma Sainz, así como representantes de la Unión Temporal de Empresas (UTE) Arranz Acinas y Vías y Construcciones S. A., responsables de las obras.
El presidente de Feve abrió el turno de intervenciones con una rueda de agradecimientos a las administraciones y empresas participantes, para añadir que la obra «era un reto importante y muy esperado por la sociedad ovetense y, bien es verdad que con algún retraso, hoy ya es una realidad».
Además del esfuerzo económico realizado por Feve y el Ayuntamiento ovetense, Villalta destacó es esfuerzo técnico que conllevó la modificación de la fisonomía de una zona muy degradada, pues la construcción del apeadero precisó modificaciones del trazado viario y de la catenaria. «Nuestra apuesta por esta ciudad y esta comunidad autónoma es prioritaria», resaltó Villalta, que enumeró también otros proyectos en marcha en Asturias: «recientemente, el apeadero de Grado y actuaciones en Gijón, Sama de Langreo y Pola de Siero, con una apuesta por la modernización y renovación de todos nuestros trenes». En esta legislatura, aseguró el presidente de Feve, «vamos a completar el cambio de todos nuestros trenes y también estamos trabajando en la electrificación de todo el trazado ferroviario desde Cudillero hasta el límite con Cantabria, y el próximo día 29, comenzarán a funcionar 32 trenes diarios semidirectos entre Gijón y Oviedo».
El delegado del Gobierno en Asturias, Antonio Trevín, que vivió dos años en Vallobín, se extendió en las inversiones del Gobierno de Rodríguez Zapatero en Oviedo -«265 millones de euros entre barrios, estación de Llamaquique, obras del Arqueológico y del Archivo en la antigua cárcel...»- y aseguró que «el Gobierno de España colaborará codo con codo con Oviedo».
El consejero de Infraestructuras agradeció a Feve «el esfuerzo realizado; es una gran satisfacción poder corresponder a una demanda ciudadana».
