D. ORIHUELA

El tijeretazo anunciado por el presidente José Luis Rodríguez Zapatero para reducir el déficit público ha agitado las aguas en el comité de empresa del Ayuntamiento de Oviedo. El sindicato de trabajadores del Ayuntamiento de Oviedo (STAO) y el Sindicato del Área de Seguridad (SAS) emitieron ayer un comunicado arremetiendo contra los recortes que propone el Ejecutivo socialista de Zapatero.

Los sindicalistas pedirán en la mesa de negociación que el Ayuntamiento de Oviedo suprima un acuerdo adoptado el 21 de diciembre de 1999 por el que se permite que un trabajador municipal ocupe un cargo de responsabilidad en la estructura regional o estatal de un sindicato. STAO y SAS apuntan directamente a José Benigno Suárez, responsable comarcal de UGT en Oviedo y miembro de la ejecutiva regional ugetista. Suárez «cobra su sueldo del Ayuntamiento sin que esta liberación tenga ningún coste ni en horas ni en dinero para su sindicato».

Las dos centrales mayoritarias entre los trabajadores municipales consideran que dentro de las medidas de austeridad y recorte que propone el Gobierno no se puede permitir «que los ovetenses estén pagando con sus impuestos a un directivo de UGT que trabaja exclusivamente para el sindicato», y se preguntan si ocurre lo mismo con el resto de dirigentes de UGT y CC OO, «si les pagan el salario las empresas e instituciones por las que están contratados para que trabajen en exclusiva para sus sindicatos». Los denunciantes pedirán que se revoque el acuerdo de hace once años porque es «un despilfarro» para las arcas municipales.

Esta es la medida más a pie de obra que proponen y la más inmediata, pero también piden al equipo de gobierno municipal que mantenga el poder adquisitivo de sus trabajadores, ya que en su opinión los recortes para rebajar el déficit deben hacerse en otras cuestiones, como eliminando los sobrecostes de las obras públicas y los fondos de formación que son la principal fuente de financiación «para el enorme ministerio de liberados y empleados sin ocupación que mantienen». STAO y SAS piden también que se hagan importantes recortes en los miles de millones de euros «que se dilapidan» en las televisiones públicas, ya que «con sólo ese dinero» ya se cumpliría el objetivo de reducción del déficit público que se ha propuesto el gobierno.

En su opinión, la postura de UGT y CC OO es cómplice con la actitud del gobierno.