L. S. NAVEROS

La calle Muñoz Degraín y la prolongación de González Besada han sido incluidas finalmente por la Policía Local en el «plan 30», el proyecto impulsado en colaboración con el Principado y la Universidad de Oviedo para impulsar el uso de la bicicleta en la ciudad.

La concejalía de Seguridad Ciudadana había dejado para el último momento la decisión sobre si incluía o no a Muñoz Degraín y General Elorza en este plan, reservando uno de los carriles de estas vías para uso prioritario de bicis, con una restricción de velocidad de 30 kilómetros por hora. Finalmente, ha optado por incluir en el proyecto a Muñoz Degraín, «como se había pensado en un inicio», y dejar fuera a General Elorza, ante la saturación de tráfico que sufre esta vía, que forma parte de la ronda interior.

«Tras los cambios en el tráfico de Muñoz Degraín, comprobamos que la circulación está funcionando muy bien, sin atascos ni problemas. El carril dedicado a carga y descarga y aparcamiento de motos deja libre más de un metro hasta el segundo carril, por lo que consideramos que se puede compatibilizar con el uso de la bicicleta, que es el objetivo que se ha propuesto el "plan 30"», señaló el intendente Manuel Secades, uno de los responsables de la implantación de este proyecto.

En General Elorza, «el tráfico está muy saturado, en los dos carriles, por lo que consideramos que no era aconsejable implantar en esa zona el carril 30».

Con la inclusión en el «plan 30» de Muñoz Degraín y del tramo de González Besada más cercano a la plaza de Castilla, estas vías quedan con un carril limitado a 30 kilómetros por hora, que incluye carga y descarga y zonas de aparcamiento, y otro carril en el que se limita la velocidad a 40 kilómetros por hora.

El «plan 30» incluye la restricción de circular a esta velocidad en todo el centro de la ciudad, aunque no se impondrán multas por superarla, y carriles restringidos en parte de las rondas y en las arterias que van a los principales barrios de Oviedo, con el objetivo de fomentar el uso de la bicicleta.