Ángel FIDALGO

Félix Serrano González-Solares, ex alcalde de Oviedo y empresario, falleció ayer, a la edad de 91 años. Estaba casado con Concepción Vega de la Fuente. No tuvieron hijos. El funeral de cuerpo presente se celebra hoy, a las doce de la mañana, en la iglesia parroquial del Corazón de María, y después recibirá cristiana sepultura en el cementerio de San Salvador.

Félix Serrano fue alcalde de Oviedo entre los años 1975 y 1978. Había llegado al Consistorio tras la renuncia de Manuel Álvarez-Buylla López-Villamil. Y fue en esta etapa en la que se sintió atraído por la política, que lo llevaría a Madrid como procurador en Cortes por el tercio familiar.

En esta época conoció a Rodolfo Martín Villa, con el que entabló una gran amistad, y fue uno de los que votaron la ley de Reforma Política auspiciada por Adolfo Suárez, y que supuso el finiquito del anterior régimen.

Pero su gran vocación fue siempre la empresa familiar: Hijos de Francisco Serrano, S. A., con su marca comercial más conocida de Anís de la Asturiana, a la que dedicó toda su vida; aunque el fútbol fue su gran pasión. De hecho, Félix Serrano se hizo cargo de una gestora del Real Oviedo en unos tiempos difíciles, entre diciembre de 1964 y junio de 1965.

Pero no sólo era socio del Real Oviedo, sino también del Real Sporting de Gijón y, como viajaba frecuentemente a Madrid por cuestiones empresariales, también era socio del Real Madrid y del Atlético de Madrid.

Félix Serrano era el mayor de seis hermanos y desde pequeño fue animado a dedicarse a los negocios de la familia que había fundado su padre, Francisco Serrano López-Brea y su hermano Julián, relacionados con la destilería.

Los Serrano habían llegado a Asturias en 1895; fundaron el primer establecimiento en la ovetense calle del Rosal, de donde pasaron a La Corredoria para aumentar la destilería y posteriormente a la calle Cervantes.

Más adelante los Serrano deciden salir de Asturias para aumentar su negocio y se instalan en la localidad toledana de Quintanar de la Orden, donde el fundador disponía de terrenos para levantar una nueva fábrica que por su situación (a sólo 120 kilómetros de Madrid) abría un importante mercado potencial.

Félix Serrano, tras licenciarse en Ciencias Químicas, se incorporó muy joven a la empresa familiar, que en los años cincuenta dio el salto a América al levantarse una fábrica de destilados en la Argentina.

En una de sus visitas a este país Félix Serrano entró en contacto con el mundo del fútbol, y le apasionó. Viaje tras viaje fue interesándose por la Liga argentina, donde realizó algún fichaje interesante, como los argentinos Sánchez Lage y Sará.

Félix Serrano fue también uno de los socios fundadores del Club de Tenis, en el que pasó en animada tertulia muchas horas de sus últimos años.

Hoy, las banderas ondearán a media asta en el Ayuntamiento en señal de duelo.